El fin del mundo según el cine

Ya que pasó el 21 de mayo: una lista -arbitraria- de las mejores, peores, más ridículas y más extrañas representaciones del fin del mundo en el cine (y sus derivados).
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Para este momento casi todos habrán escuchado que el profeta radial Harold Camping, norteamericano y devoto cristiano, avisó a través de una fuerte campaña mediática que el fin del mundo llegaría el 21 de mayo y el fin del universo le seguirá cinco meses después: el 21 de octubre. Aunque ahora, a unos días de la fecha de Camping, sabemos que el mundo sigue dando vueltas, diversas películas nos dan ejemplos de cómo podría haber sido el apocalipsis.

Soylent Green: una de las primeras películas que mostró una visión completamente fatalista del futuro del hombre. En el año 2022 el planeta ha llegado a una sobrepoblación catastrófica. Las ciudades del mundo rebasan los 50 millones de habitantes. Casi toda la población está compuesta por gente en extrema pobreza. El detective Robert Thorn (Charlton Heston) investiga la muerte de un ejecutivo de la compañía Soylent Corporation que produce el único alimento que queda para la población: Soylent Green. Poco a poco su investigación lo lleva a descubrir que todos los mares y recursos naturales ya no existen. La comida que se produce se hace de los cadáveres de otros humanos. La frase final que grita Charlton Heston sigue impresa en la memoria: “Soylent Green is people, people!”

 

 

The Road: basada en la novela del mismo nombre de Cormac McCarthy, la historia se desarrolla en un futuro no muy lejano. El mundo está completamente devastado. El aire, el agua y la tierra están contaminados por completo. Quedan muy pocos seres humanos. Los animales ya no existen. Un padre y su hijo caminan sin sentido a lo largo de las carreteras de Estados Unidos, tratando de conseguir comida y refugios. El papá (Viggo Mortensen) carga un revólver con sólo dos balas, una para su hijo y otra para él. Nunca sabemos específicamente qué fue lo que sucedió, lo único que vemos es la desolación de un mundo prácticamente abandonado.

 

 

 

The Hitchhiker’s Guide To The Galaxy: nadie dijo que el fin del mundo no puede ser cómico. La película está basada en una serie de novelas y programas de radio creados por el escritor británico Douglas Adams. La diferencia de esta película con las otras cintas de la lista es que el mundo es destruido en los primeros diez minutos de la historia. La razón: los Vogon están construyendo una nueva carretera intergaláctica y nuestro planeta les estorba. El único humano sobreviviente es Arthur Dent (interpretado por Martin Freeman, el nuevo Bilbo en la película The Hobbit). Lo salva su amigo extraterrestre Ford Prefect, quien tiene una rara afinidad por las toallas del baño. Suben a bordo de la nave Heart of Gold e inician una serie de aventuras a través del universo junto con Zaphod Beeblebrox (presidente de la Galaxia) y Marvin The Paranoid Android (robot eternamente deprimido). Este último fue la inspiración para la canción Paranoid Android de Radiohead.

 

http://www.youtube.com/watch?v=4vgR8gpSR-s

 

Dr. Strangelove: or how I learned to stop worrying and love the bomb: dirigida por Stanley Kubrick en 1964 cuando las tensiones de la Guerra Fría entre Estados Unidos y Rusia estaban en su punto climático. En un inicio, Kubrick quería hacer una película seria, pero se dio cuenta que lo que estaba pasando era tan ridículo que lo único que podía hacer era una comedia. El general del ejército Jack D. Ripper está convencido de que los rusos le quieren robar a los norteamericanos sus valiosos fluidos corporales. Por lo tanto, despacha a todos los bombarderos de la fuerza aérea para destruir el territorio de la Unión Soviética. El intento de detenerlos falla y ambos países despliegan todo su arsenal nuclear. El homónimo Dr. Strangelove (Peter Sellers) no está tan preocupado por el fin del mundo. Según sus cálculos van a sobrevivir más mujeres y por lo tanto por cada hombre habrán en promedio diez mujeres con las cuales acostarse para repoblar el mundo.

 

Thundarr el Bárbaro: una caricatura que se transmitió a lo largo de los ochenta, cuya rúbrica de entrada contaba la forma en la que el mundo se terminó. Un planeta perdido pasó muy cerca entra la tierra y la luna provocando un caos total. La luna se parte en dos pedazos y la tierra queda sepultada entre escombros. Dos mil años después, en 3994, de entre las cenizas y pocos humanos que quedan surge un nuevo héroe: Thundarr, que usa una lightsaber chafa hecha por la Pincesa Ariel, hija de un gran sabio, y que ha heredado el conocimiento de las antiguas civilizaciones. Los dos viajan junto con el mutante Ookla (cruza de Chewbacca y Lemur), recorriendo las antiguas ciudades en busca de objetos mágicos que les ayuden a liberar al resto de los humanos que están oprimidos por villanos sobrenaturales. La serie encontraba humor en las observaciones de Thundarr, como cuando, tras encontrar los edificios de Nueva York, exclama con aires de científico: “Aquí vivían seres con alas para poder subir tan alto.”

 

 

The Stand: una de las novelas más famosas de Stephen King (adaptada para televisión en los noventa). Muchos de sus admiradores la consideran su trabajo más ambicioso y más completo. El fin del mundo llega en forma de un virus creado por el ejército norteamericano. Al salirse de control poco a poco el mundo se va contaminando. Lo que parece una gripa sencilla acaba matando a casi todo los seres humanos. La historia se centra en que el bien y el mal (el cielo y el infierno) se pelean por ganar súbditos entre los supervivientes. Al final de la historia ambas tribus se enfrentan en Las Vegas, Nevada y la confrontación al final es una pelea entre un Dios vengativo y los infieles.

 

 

Wall-E: es una de las mejores películas animadas que se han hecho. El inicio de la película es después del fin del mundo. Wall-E es el último robot de un modelo dedicado a triturar basura y almacenarla para el futuro regreso del hombre. El filme comienza con casi media hora sin una línea de diálogo, pero las emociones y la soledad del protagonista quedan reflejadas en cada escena. Al poco tiempo llega una nave de reconocimiento para ver si el planeta es habitable nuevamente y la aventura de nuestro pequeño robot comienza.

 

 

In The Mouth Of Madness: la última gran película de John Carpenter es también el mejor representante fílmico de la literatura de H.P. Lovecraft. El proyecto es un homenaje a su mito de Cthulhu: la forma en que antiguos Dioses de apariencia monstruosa eran los que habitaban la tierra hace millones de años. La historia comienza con el detective John Trent que es contratado por una editorial (el editor en jefe es Charlton Heston) para localizar al escritor más famoso del mundo: Sutter Cane. Gradualmente, el detective va descubriendo que el escritor es quien está contando y controlando su vida. Todo en búsqueda de crear la novela perfecta que volverá loco a todo el que la lea. El final deja a la humanidad al borde de la locura y John Trent se sienta en una sala de cine a comer palomitas mientras se acaba el mundo.

 

Knowing: Nicolas Cage protagoniza ésta película del fin del mundo dirigida por el director de ciencia ficción Alex Proyas. Un niño dibuja una serie de números en su clase, todos los demás niños hacen lo mismo y luego lo meten todos en una caja y lo entierran en el patio de la escuela (una máquina del tiempo). Años después se encuentra el dibujo y Nicolas Cage descubre que los números revelan la fecha exacta de las mayores desgracias desde el momento en que el niño hizo el dibujo hasta ese momento. Los últimos números son el final del mundo. Una película que fue, a mí parecer, menospreciada por la crítica.

 

Planet Of The Apes: una de las películas favoritas sobre el fin de la humanidad. Poca gente no sabe la sorpresa de su final y no me refiero a la locura de ver la cabeza de Abe Lincon en el (mal) remake de Tim Burton. Charlton Heston es un astronauta que viaja hacia otro planeta y cuando llega descubre que ahí los simios hablan, piensan y dominan al ser humano. La historia está basada en una novela de Pierre Boulle y la principal diferencia que cambiaron es que los simios viven en ciudades modernas y con avanzada tecnología, no como en la película que viven en chozas y no conocen las máquinas. Al final de la historia Heston descubre las ruinas de la Estatua de la libertad y se da cuenta que no está en otro planeta, sino en la tierra.

 

http://www.youtube.com/watch?v=31QUOUxqz2M

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José Rubén Escalante nació en la Ciudad de México en 1978. Ha sido cineasta, crítico de cine y publicista.


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