donde nuestro dolor serรก nada,
pasos de vendedor ambulante.
[J. G.]
Tengo un dolor de cabeza. Un agudรญsimo dolor de cabeza.
Rechinar de llantas en el pavimento. Estallido en la sien
izquierda. Cien centenares de balas que ya no dan en los
cuerpos de mi ciudad sino en la sien izquierda. Putรญsimo dolor
de cabeza / que se va expandiendo hasta los lรญmites mรกs lejanos.
ยฟY si te tocara? ยฟY si de pronto estirara mi mano para tocarte?
ยฟSentirรญas tambiรฉn la corriente elรฉctrica que brota de mi
crรกneo? ยฟPensarรญas en los cuerpos de mi ciudad y de mi paรญs /
y pensarรญas / tambiรฉn / en lo ridรญculo de pretender que tu dolor
es un dolor semejante?
*****
Las muelas se aprietan unas con otras. Maxilares / creo que se
llaman. Se contrae la mandรญbula entera. Si tuviera mรกs serรญa
todo yo una boca apretada, cerradรญsima. A veces la calle
tambiรฉn se cierra y se aprieta a sรญ misma y termina
escupiรฉndonos. Hasta aquรญ, parece que dice / y pinta una raya
de gis. Queda marcado un contorno. Queda delimitado / el
territorio de la muerte. Un oscuro tumor que palpita muy cerca
de la sien.
*****
Se parece mucho al mar este dolor. Se parece porque tambiรฉn
รฉl tiene su vaivรฉn / y si de pronto parece que nos deja, que
podemos ser libres y brindar a nuestra salud, si de pronto parece
que se ha ido, no tarda en regresar. Y cuando vuelve trae
consigo el alarido que lo nombra. La sangre que pulsa y que
revienta en nuestras venas. Su denso fluido derramado. Se
parece / entonces / al mar / este dolor / y tambiรฉn se parece
mucho / al deseo.
*****
Disco rayado. Sonido que pronto se repite. Rechinar de llantas
en el pavimento. Nadie puede salir de la casa. / Nadie / puede /
salir. Atadas las manos detrรกs del cuerpo, las piernas atadas. Un
interlocutor innecesario / que dice que nadie, que mucho menos
/ tรบ. Entonces el grito se gesta. Crece en el estรณmago / y poco a
poco / va subiendo. Al final la cara se contrae. El gesto anuncia.
Incluso los ojos se cierran / pero nada. Nadie. Mucho menos tรบ.
*****
Cien centenares de balas. Mรกs. Cien cientos de centenares de
balas. Lo mismo sobre la sien izquierda / o sobre cien / cientos
de centenares de cuerpos en las calles de mi ciudad. La hija del
vecino. El vecino. Toda su familia. La calle entera. Cien /
centenares / de calles / repletas de cuerpos que crecen como
hierba. No hay metรกfora posible. No hay mรกs que balas / en
cada uno de los cuerpos / de mi ciudad / y en mi sien izquierda.
*****
Ojalรก vinieras a hundir tus manos en mi frente. Dentro de mรญ
hay relinchos de potros asediados. Sus crines y sus cascos y
relinchos / interminables. Patean tambiรฉn por todas partes. Ven
a hundir tus manos en mi frente y sรกcalos de aquรญ. Que se vayan
los cabrones.
*****
Tengo un dolor de cabeza / y no hay quiรฉn me lo quite. Las
aspirinas no han hecho su trabajo. La aguja punzante sigue ahรญ,
macerando sus gritos en mi adentro. Toda brรบjula extraviarรญa
su norte. No florecerรญan mรกs cosas. Nadie / podrรญa salir de casa
/ si a este dolor de cabeza se le ocurriera salir a tocar puertas.
No hay paracetamol que baste y no sirve el dolac. No hay quien
me quite este dolor.
*****
No anuncia su llegada. No / toca la puerta, no / hace sonar el
timbre, no / llama con anticipaciรณn. De un segundo a otro estรก
junto a nosotros, acicalado y seriecito: con un mondadientes en
la boca. Nunca sรฉ cuรกndo viene pero de pronto no / tengo
palabras para nombrar las cosas mรกs cercanas y no / sรฉ caminar
sino dar tumbos. No / me dice quรฉ quiere, no / me cuenta sus
secretos, no / me deja estar tranquilo y no / estoy seguro de
seguir hablando de lo mismo.
*****
Quejarse es un oficio cotidiano / pero no hay quiรฉn, ni cuรกndo,
ni dรณnde. Aislado. Desnudo en la habitaciรณn vacรญa de mรญ
mismo, vengo a traer una ofrenda a nuestros muertos: el
negrรญsimo dolor que me palpita / en la sien izquierda. Su
capacidad de dar sombra / como un รกrbol. Su tacto violento que
me asusta. Quejarse o dar un paso / (hacia adelante o hacia
atrรกs, no importa mucho). Mejor me quedo aquรญ / a ver si se me
pasa.
*****
No imagino otro dolor como el que siento. No nos une. Quiรฉn
puede aguantar en su cabeza / el peso de la sangre que se
estanca y hace suyo este terreno. Para ti / tengo la cifra exacta,
la exacta fecha en que llegรณ a nosotros / y no eres capaz siquiera
de entenderlo / porque mi dolor es omnipresente, porque mi
dolor todo lo sabe y todo lo puede, porque mi dolor es la ley y
no puedes venir aquรญ / sin consultarme.
*****
Hay una chispa en el bosque / que comienza por encender las
hojas secas. Por encender las ramas / mรกs pequeรฑas. El canto
de las aves / mรกs azules. El agua se apresura por los finos
filamentos. Tallos. Troncos. Labios. Verde que ya no es. Rojo
que se pronuncia. Creciente rumor. Crepitar. Como cien
centenares de grillos cantando al mismo tiempo la misma
tonada. Nadie ve lo que pasa / y si alguien viera / se taparรญa los
ojos. Nadie se da cuenta hasta que aparecen poco a poco / las
cenizas. Los muรฑones. Las partes / desprendidas / y unas pocas
raรญces.
(1992) es poeta y editor. En 2013 su poemario Las mรกscaras resultรณ ganador del Premio Nacional de Poesรญa Joven โJosuรฉ Mirloโ. Ha sido beneficiario del PECDA Morelos en 2011 y 2014. Ha publicado el poemario Ciudades bajo la lluvia (ritual para conjurarte) (EdicioneZetina, 2011) y Gรฉnesis (Apuntes para una teorรญa sobre la imagen y el sonido) (ICM, 2013). Muestras de su trabajo aparecen en diversas antologรญas, entre ellas Poetas parricidas (generaciรณn entre siglos) (Cuadrivio, 2014).