Foto:Dans, CC BY-SA 4.0 , via Wikimedia Commons

El futuro de Gaza: cuatro escenarios

Una reflexiรณn sobre el probable devenir del territorio que es hoy el centro de un violento enfrentamiento militar.
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En momentos en los que el รกspero duelo entre Israel y Gaza continรบa y las sirenas aรบllan en mi entorno, se antoja imperativo sugerir y ponderar el devenir de Gaza, ejercicio futurolรณgico que me ocupรณ en el pasado โ€“en tรฉrminos absolutamente diferentesโ€“ al considerar el devenir de algunos paรญses latinoamericanos.  

Gaza ocupa hoy una angosta franja con playas en el Mediterrรกneo y con fronteras entre Egipto, por un lado, e Israel por el otro. Le abruma un alto coeficiente demogrรกfico que le conduce a superar los dos millones de habitantes en una superficie que apenas abraza 365 kilรณmetros cuadrados. El resultado: un apretado territorio que exhibe una de las densidades mรกs altas del mundo.

En el abastecimiento de electricidad, gas y agua depende absolutamente de Israel, y para gozar de algรบn razonable nivel socioeconรณmico se subordina a la ayuda econรณmica de Qatar. Sin el soporte del uno y del otro, Gaza no puede contar con un elemental nivel de vida. 

Entre 1967 y 2005, Israel ocupรณ la quinta parte de su territorio y levantรณ allรญ mรกs de veinte colonias agrรญcolas. Con el paso del tiempo, las negociaciones con Egipto y con Yasser Arafat condujeron en 2007 a un nuevo orden territorial y polรญtico gobernado por Hamรกs, fracciรณn extremista palestina y musulmana que desde entonces rivaliza con las corrientes algo mรกs moderadas que dominan en Ramala.

El previsible desmantelamiento de la รฉlite hoy dominante en Gaza como resultado de su brusco enfrentamiento militar con Israel me conduce a reflexionar sobre el probable devenir de este territorio.

Sin omitir otras posibilidades, anticipo cuatro escenarios que podrรญan presentar al concluir el actual duelo militar. Creo que estimar sus desiguales costos y beneficios constituirรก una tarea ineludible para las instancias nacionales e internacionales interesadas en instituir un fecundo equilibrio en esta parte del mundo.

 

1. Gaza ocupada por Israel

Esta situaciรณn se conociรณ desde la Guerra de los Seis Dรญas (1967) hasta el primer quinquenio del siglo. Estimo que podrรญa reproducirse si Jerusalรฉn se inclinara a reimponer en Gaza un severo control militar despuรฉs de eliminar al liderazgo de Hamรกs.

En este escenario, Israel no solo ampliarรญa los servicios de energรญa y agua que hoy suministra. Para preservar un orden razonable, deberรญa ademรกs invertir en servicios sociales bรกsicos y reconstruir โ€“con apoyo regional e internacionalโ€“ viviendas y servicios bรกsicos hoy disueltos como resultado del choque militar.  

Por aรฑadidura, una incorporaciรณn informal e indirecta de Gaza a Israel implicarรญa una abrumadora adiciรณn demogrรกfica que se sumarรญa, de manera directa u oblicua, a los ciudadanos de origen รกrabe-musulmรกn, que hoy representan en Israel algo mรกs del 20% de la poblaciรณn total.

En estas circunstancias, la inestabilidad institucional de Israel serรก constante. Ni la probable ayuda de diferentes estados musulmanes ni el apoyo de organismos internacionales habrรกn de suavizar el abrumador malestar social y la inquietud religiosa si Gaza llegara a formar parte de Israel.  

De aquรญ mi conclusiรณn: por sus altos costos y flacas perspectivas, este escenario es apenas viable. Solo una perversa fantasรญa es capaz de enhebrarlo.   

 

2. Gaza administrada por Egipto 

Geogrรกfica y culturalmente, Gaza es una prolongaciรณn de Egipto. No pocos imaginan que su formal enlace con este paรญs no habrรก de presentar altos obstรกculos.

Sin embargo, juzgo que la adiciรณn de una Gaza empobrecida, que hoy reclama altas inversiones para lograr alguna factibilidad socioeconรณmica, multiplicarรญa las severas dificultades que hoy abruman a El Cairo.

En otros tรฉrminos, para convertir a Gaza en una economรญa viable o en un seductor nรบcleo turรญstico, Egipto deberรญa invertir, en este escenario, considerables recursos que en estos dรญas este paรญs prefiere dedicar a otros temas.  

Sin embargo, en contraste con el escenario anterior, no cabe descartarlo absolutamente. Es verosรญmil que con amplia ayuda internacional y conservando sus acuerdos de paz con Israel, Egipto podrรญa considerar, con mรบltiples reservas y condiciones, la anexiรณn de Gaza.

 

3. Gaza como parte del futuro estado palestino

En el pasado, tal posibilidad fue repetidamente considerada por Jerusalรฉn y Ramala. Para concretarla, habrรญa necesidad de diversificar las vรญas de comunicaciรณn entre la capital palestina y Gaza, con la activa participaciรณn de Israel.

Tres factores tornarรญan factible este escenario: primero, el sensible acortamiento de las distancias religiosas e ideolรณgicas que hoy se conocen entre los palestinos que habitan estas zonas. Despuรฉs, la amplia disposiciรณn de Israel para aceptar una entidad palestina que le rodearรญa desde la frontera con Jerusalรฉn hasta el Mediterrรกneo. Y, en fin, la negociaciรณn definitiva de los territorios ocupados en la Guerra de los Seis Dรญas, de suerte que buena parte de ellos se incorporarรญan por acuerdo mutuo a Israel.

Ninguno de estos factores se presenta hoy en el escenario regional.

 

4. Gaza como entidad independiente

Los acuerdos de Abraham concertados con paรญses de la Penรญnsula arรกbiga, abren hoy la perspectiva de una amplia ayuda por parte de todos ellos, y no solo de Qatar.

Ciertamente, organismos internacionales y no pocos paรญses โ€“desde Estados Unidos a Turquรญa, por ejemploโ€“ revelarรญan un interรฉs estratรฉgico o econรณmico para respaldar a Gaza, al menos en sus primeros pasos como entidad nacional independiente, ya inserta en las Naciones Unidas.

Es verosรญmil que en estas circunstancias, y por propio y elemental interรฉs, esta nueva entidad nacional habrรญa de moderar por fin la efervescencia religiosa que hoy sacude a Gaza.

 

En suma: mรกs allรก de los violentos choques que hoy afectan a las poblaciones de Israel y de Gaza, y sin soslayar las tensiones รฉtnicas y polรญticas que nos abruman en este rincรณn del mundo, cabe imaginar en este contexto futuros posibles y factibles.

No es un hueco ejercicio intelectual. Se trata de una imperativa necesidad que se tornarรก ineludible al concluir las hostilidades, hoy gobernadas en gran parte por una maliciosa cibernรฉtica y una errada polรญtica. 

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es acadรฉmico israelรญ. Su libro mรกs reciente es M.S. Wionczek y el petrรณleo mexicano (El Colegio de Mรฉxico, 2018).


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