To be America’s enemy is dangerous;
to be America’s friend is fatal.
Atribuido a Henry Kissinger
En su segunda versiรณn โque presenciamos en vivo y en directoโ este Pacto Mรณlotov-Von Ribbentrop tiene, como el original, varias capas de intereses. En las clรกusulas secretas de aquel, firmado entre los ministros de Relaciones Exteriores de la URSS y Alemania en 1939, nazis y soviรฉticos se repartรญan a todos los paรญses que los rodeaban, desde Polonia hasta Finlandia. Los alemanes, para empezar a fincar su lebensraum y tener las manos libres en el frente occidental; los soviรฉticos, para fortalecer al Ejรฉrcito Rojo, que Stalin habรญa dejado en ruinas despuรฉs de fusilar a miles de sus mejores estrategas y militares, y para crear un cordรณn sanitario de paรญses entre Europa y la URSS.
Pero la posibilidad โescalofrianteโ de que la Alemania nazi pudiera consolidar su Tercer Reich milenario dependรญa, a fin de cuentas, de un recurso que abundaba en la URSS y los nazis necesitaban como el agua: el petrรณleo. Para asegurarlo, dos aรฑos despuรฉs, Hitler tirรณ el pacto con Stalin a la basura y diseรฑรณ una nueva estrategia. Despuรฉs de avasallar a Europa, la maquinaria militar nazi se desplegรณ como una tijera: una hoja invadiรณ a la Uniรณn Soviรฉtica y se encaminรณ al Volga; la otra avanzรณ desde el norte de รfrica para cerrarse en el Cรกucaso. Buscaban apoderarse de inmensas reservas de petrรณleo. La derrota en Stalingrado fue el principio del fin de esa estrategia, y del nazismo: el inicio de la retirada de los alemanes de la URSS y de รfrica. Sin petrรณleo, el poderoso ejรฉrcito de Rommel quedรณ varado en el desierto.
Ahora, frente a Ucrania, Trump y Putin โy sus portavoces en el exteriorโ, el avezado diplomรกtico Sergei Lavrov, que como Mรณlotov sacrificรณ su prestigio para apoyar a Putin hasta la ignominia, y el bisoรฑo secretario de Estado Marco Rubio, hablan de campaรฑas redentoras para pacificar a Ucrania y alejar al paรญs de la tentaciรณn de incorporarse a la OTAN y a la UE: su destino, predican, es la neutralidad desmilitarizada.
Una neutralidad muy conveniente. Si este nuevo pacto entre enemigos histรณricos tiene una clรกusula secreta, รฉsta debe ser una larga lista de minerales “crรญticos” y elementos de tierras raras (REE). Se llaman “crรญticos” porque son cruciales en las cadenas productivas modernas. Indispensables para la transiciรณn a energรญas limpias (desde plantas nucleares hasta turbinas eรณlicas), la producciรณn de aparatos electrรณnicos, de IA y de armamentos (entre ellos, aviones de combate y drones).
El paisaje ucraniano es su bandera: cielos azules que cubren grandes plantรญos de granos y girasoles. Una de las zonas agrรญcolas mรกs fรฉrtiles del mundo. Pero el subsuelo es tan rico como la superficie: contiene el 5% de los recursos minerales del mundo. Depรณsitos de 22 de los 45 minerales “crรญticos” โREE incluidos. Entre ellos, 500 mil toneladas de reservas de litio y la quinta parte de las de grafito, necesarios, entre otras cosas, para el funcionamiento de plantas nucleares. Putin lo ha sabido siempre, por eso ha insistido una y otra vez que ningรบn arreglo de paz puede incluir la devoluciรณn de las provincias ucranianas que ha invadido: contienen el 40% de la riqueza mineral del paรญs.
Donald Trump se enterรณ hace menos tiempo y el botรญn resultรณ irresistible; hizo a un lado la propuesta de Zelenskii, que le habรญa ofrecido invertir en la explotaciรณn de minerales a cambio de ayuda, y decidiรณ, simplemente, apoderarse de ellos. Haciendo gala de su crudeza y avaricia, enviรณ a su secretario del Tesoro, Scott Bessent, con un documento para firma โde Zelenskyii por supuesto- que establecรญa que E.U. se apoderarรญa, como compensaciรณn por su ayuda, y de forma permanente, de la porciรณn mรกs productiva de la economรญa ucraniana. El presidente Zelenskii, un estadista valiente, hรกbil y bien informado, le dijo no.
Trump parece incapaz de visualizar y entender la red de intereses que mueven a los principales actores globales y las repercusiones de sus iniciativas sobre ellos. Leyรณ mal a Zelenskii y mรกs aรบn a Putin. El dictador ruso no compartirรก con รฉl los recursos ucranianos y, ciertamente, jugarรก siempre a favor de su principal aliado: el lรญder chino Xi Jinping. China tiene la mitad de las reservas globales de REE y es la principal procesadora en el mundo de metales “crรญticos” como el nรญquel, litio y cobalto. Limitar la exportaciรณn de estos minerales es su mejor arma contra la polรญtica arancelaria de Trump. Harรก hasta lo imposible por evitar que se apodere de los depรณsitos minerales ucranianos. Trump puede salir de este juego triangular con las manos vacรญas. ~
Publicado en Reforma el 23/II/25.
Estudiรณ Historia del Arte en la UIA y Relaciones Internacionales y Ciencia Polรญtica en El Colegio de Mรฉxico y la Universidad de Oxford, Inglaterra.
