Matteo Salvini

La Lega en Italia: rupturas y continuidades

La Lega ha conseguido sacudirse la condiciรณn de partido subalterno de Forza Italia. Ahora el lรญder de la derecha italiana tiene nombre y apellido y no responden a los de Silvio Berlusconi.
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La principal noticia de las elecciones celebradas el 4 de marzo en Italia fue el histรณrico resultado del Movimiento Cinco Estrellas (M5S), que conseguรญa el 32,68% de los votos. Histรณrico porque al mejorar los registros de las elecciones de 2013, en las que tambiรฉn fue el partido mรกs votado logrando un consenso del 25,56%, el movimiento fundado por Beppe Grillo se convertรญa en el primer partido nuevo en la historia electoral europea de posguerra que mejora sus resultados en las segundas elecciones generales a las que se presenta.

Sin embargo, el รฉxito del M5S relegรณ a un segundo plano el espectacular avance electoral de la Lega de la mano de su nuevo secretario. Matteo Salvini tomรณ las riendas del partido en 2013 tras ganar las primarias contra uno de sus fundadores, el histรณrico lรญder Umberto Bossi. En las elecciones de ese aรฑo la Lega habรญa cosechado uno de los peores resultados de su historia, logrando solamente un 4,09% de los votos. Cinco aรฑos despuรฉs Salvini ha conseguido el 17,35%. Pero tambiรฉn algo mucho mรกs importante para la dinรกmica de la competiciรณn en la derecha italiana: la Lega ha conseguido sacudirse la condiciรณn de partido subalterno de Forza Italia. Ahora el lรญder de la derecha italiana tiene nombre y apellido y no responden a los de Silvio Berlusconi.

El รฉxito de Salvini estรก vinculado al proceso de transformaciรณn al que ha sometido a la Lega. El partido de Bossi se presentรณ a las elecciones de 1992 como un partido secesionista que sumaba su voz a las reivindicaciones de la nueva โ€œprimavera de los pueblosโ€ que se avivรณ en Europa tras la desintegraciรณn de la URSS y el final de la Guerra Frรญa. Sin embargo, en la actual Lega post bossiana ya nadie dice โ€œIl tricolore lo uso per pulirmir il culoโ€, ni grita el famoso lema โ€œRoma ladrona, la Lega non perdonaโ€, que sintetizaba a la perfecciรณn los dos ejes ideolรณgicos sobre los que trabajaba la Lega original: centro-periferia y polรญtica-antipolรญtica.

Desde 2013 Salvini ha ido transformando el partido en un sentido nacional italiano al calor de su estrecha relaciรณn con el Frente Nacional francรฉs. El periรณdico Le Monde le bautizรณ en 2014 como โ€œle cousin italienโ€ de Marine Le Pen. En este proceso de โ€œitalianizaciรณnโ€ el partido ha cambiado el nombre de la organizaciรณn, eliminando cualquier tipo de referencia a la independencia de la Padania. Y ha reformulado los sรญmbolos y la identidad del partido llevรกndose por delante TelePadania, el periรณdico La Padania y la emisora Radio Padania Libera.

Desde 2013 la Lega de Salvini ha acompaรฑado la reformulaciรณn nacional-populista del partido con una estrategia orientada a expandir la presencia del mismo mรกs allรก de sus feudos tradicionales en el norte de Italia. Antes de llegar al รฉxito de las elecciones de 2018, los resultados positivos en la llamada โ€œzona rossaโ€ ya marcaban tanto una pauta de crecimiento en espacios donde el voto obrero habรญa sido hegemรณnico, como un proceso de sustituciรณn en la derecha italiana a nivel nacional. En las elecciones regionales de Emilia Romaรฑa de 2014 la Lega se convirtiรณ en el principal partido de la derecha consiguiendo un 19,42% de los votos, donde Forza Italia solo conseguรญa un 8,36%. En las elecciones regionales de la Toscana, en 2015, la Lega obtenรญa un 16,16% de los votos cuando en las elecciones generales de 2013 no habรญa pasado del 0,7%.

Segรบn los estudios electorales publicados por el Istituto Carlo Cattaneo en el libro Il vicolo cieco. Le elezioni del 4 marzo 2018 (Il Mulino, 2018), el crecimiento de la Lega en el norte de Italia se nutre, sobre todo, de votantes de Forza Italia (Popolo della Libertร  en 2013). Una transferencia de voto que resulta lรณgica entre dos partidos que histรณricamente han ido en coaliciรณn y comparten una parte sustancial de sus programas. Sin embargo hay algunas corrientes de transferencia de voto a la Lega que rompen con la lรณgica del circuito de voto izquierda-derecha. Unas transferencias que permiten visualizar, asรญ, el รฉxito del discurso populista a la hora de generar un consenso transversal que supera barreras ideolรณgicas clรกsicas. Por ejemplo, en la llamada โ€œzona rossaโ€ la Lega es el partido que mรกs crece en las elecciones del 4 de marzo en comparaciรณn con 2013, un 16,9%. En ciudades como Mรณdena, Florencia o Bolonia entre el 20-24% de votantes que en 2013 habรญan dado su voto al Partido Democrรกtico han optado por la Lega de Salvini en 2018. Se trata de un fenรณmeno muy parecido al รฉxito del Frente Nacional en รกreas de tradiciรณn obrera que ven en la promesa proteccionista del populismo una oferta de seguridad en tiempos de incertidumbre.

Como seรฑalan los editores del volumen, los profesores Marco Valbruzzi y Rinaldo Vignati, el histรณrico resultado de la Lega y el M5S en las รบltimas elecciones puede interpretarse como la rebeliรณn de los perdedores de la globalizaciรณn en Italia. Los autores subrayan la capacidad de ambos discursos populistas para atender una demanda de seguridad, tanto cultural como econรณmica, en tiempos de crisis. En el caso de la Lega la oferta de protecciรณn se acentรบa en clave cultural y en el caso del M5S en lo econรณmico, como se ha comprobado a la luz del notable consenso que ha logrado el partido de Grillo en el sur con la oferta de una renta de ciudadanรญa. Sin embargo, esta divisiรณn no es definitiva ni concluyente. Tanto el avance de la Lega en las regiones dominadas histรณricamente por el Partido Comunista Italiano (o sus herederos) como la facilidad del M5S para asumir las polรญticas antiinmigraciรณn de la Lega en el nuevo gobierno permiten visualizar una armonรญa de fondo en sus planteamientos polรญticos. El caso del barco de refugiados Aquarius es el mejor ejemplo.

En Italia la Lega, pero tambiรฉn el M5S, han encontrado suelo abonado para desplegar un discurso que asocia de manera implรญcita o explรญcita la inmigraciรณn ilegal con inseguridad, falta de cohesiรณn social, precariedad laboral y degradaciรณn del espacio pรบblico. Segรบn publicaba La Repubblica a comienzos de febrero de 2018, para el 31% de los italianos la inmigraciรณn se ha convertido en el principal problema del paรญs. Un 71% de los italianos considera que la cantidad de inmigrantes en el territorio es muy elevada, mientras que el 64% juzga de manera negativa la forma en la que el Gobierno โ€“entonces del PDโ€“ gestiona la inmigraciรณn. Otro estudio publicado por Demos&Pi a cargo de los profesores Fabio Bordignon e Ilvo Diamanti en marzo de 2018 apunta que el 45% de los italianos ven en la ola de inmigraciรณn que viene de รfrica a travรฉs del Mediterrรกneo un amenaza para el orden pรบblico y la seguridad de los italianos.

A pesar de la transformaciรณn a la que Salvini ha sometido a la Lega existe una lรญnea de continuidad entre su partido y el dirigido por Umberto Bossi: el discurso contra la inmigraciรณn. En los orรญgenes del partido este discurso se orientaba, sobre todo, a subrayar la diferencia entre los italianos del norte y el sur de la penรญnsula. El primero era definido como un tipo รฉtnico que genera una comunidad rica, laboriosa, incorruptible y ejemplar. El segundo, en cambio, un tipo que ha producido un entorno corrupto, clientelar y subdesarrollado. Sin embargo, como ha seรฑalado el profesor Marco Tarchi, a partir de los atentados del 11 de septiembre de 2011 el discurso antiinmigraciรณn de la Lega comienza a transformarse. En su discurso pasa a tener un peso mayor la defensa de los valores de Occidente y sus nuevos enemigos pasarรกn a ser la Uniรณn Europea y el islam de forma cada vez mรกs intensa.

La preocupaciรณn por la inmigraciรณn ilegal toca fondo en Italia entre 2011 y 2013, coincidiendo con la crisis econรณmica y el gobierno tรฉcnico de Mario Monti. Sin embargo, se vuelve a disparar con la crisis de los refugiados de 2015. En buena lรณgica populista, Salvini cabalga sobre la desafecciรณn ciudadana y una de las principales promesas de la campaรฑa electoral de la Lega fue la expulsiรณn de medio millรณn de inmigrantes irregulares. La gestiรณn del caso Aquarius por parte del nuevo gobierno italiano M5S-Lega permite pensar que Salvini, nuevo ministro del interior, no va a renunciar a seguir explotando un problema que le permite seguir consolidando un consenso positivo ante una buena parte de la opiniรณn italiana.

 

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Jorge del Palacio Martรญn es profesor de Historia del Pensamiento Polรญtico en la Universidad Rey Juan Carlos. Es coeditor de Geografรญa del populismo. Un viaje desde los orรญgenes del populismo hasta Trump. (Tecnos, 2017)


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