El poeta Gregory Corso comiendo uvas en un desván de París, 1957.
Allen Ginsberg, oficial suplente del SS John Blair, alrededor del 30 de octubre de 1947, de regreso al puerto de Nueva York del viaje melancólico Galveston-Dakar.
Le pasé mi cámara al operador de radio en la popa del barco. ¿Fumando qué?
Paul Bowles preparando té de menta al llegar a la casa souk de su conocido Christopher Wanklyn, en la medina.
Tomé el tren desde Tánger y me quedé con ellos una semana. Marrakesh, Marruecos, 20 de julio de 1961.
Neal Cassady con su amor del año, Natalie Jackson, conscientes de sus roles en la eternidad.
Marquet Street, San Francisco. Cassady había sido el modelo de Kerouac para el héroe Dean Moriarty en la saga On the Road de finales de los años cuarenta, como más tarde, en los años sesenta, tomaría el volante del psicodélico camión "Further" con Ken Kesey.
Su iluminada manía por los automóviles americanos y su energía erótica habían ya escrito su nombre en los letreros iluminados de nuestra imaginación literaria antes que se hicieran las películas imitando su encanto. Por eso es que nos paramos debajo de la marquesina: para fijar el paso de las manecillas del reloj, 1955.
Jack Kerouac en la última ocasión que me visitó en mi departamento del 704 E 5th Street, Lower East Side, Manhattan. Él se veía entonces como su difunto padre, un corpulento W.C. Fields temblando con horror mortal, bajo los efectos del D.M.T. que había yo traído de Millbrook. Otoño de 1964.
Peter Orlovsky, nacido en 1933, visitando a su familia: Lafcadio, de 47 años, que vivió con nosotros en San Francisco-NY 1955-61 y después intermitentemente por años; Katherine Orlovsky, de 78 años, totalmente sorda después de la operación fallida del nervio mastoide en el hospital Eye and Ear de N.Y.
circa 1930; y Marie, hermana gemela de Lafcadio, que vivió en nuestro departamento del Lower East Side en 1959 para asistir a la escuela de enfermeras de bebés, pero dejaba enojada los trabajos tan pronto escuchaba chismes sucios.
Departamento de segundo piso en una calle solitaria de Long Island. Necesitan taxi para llegar al lejano supermercado a hacer las compras con cheques del servicio social. 26 de julio de 1967.
W. S. Burroughs en la mesa de la cocina junto a la máquina de escribir, poniéndose en forma para editar sus cartas sudamericanas.
Dormíamos en una pequeña recámara al fondo, con papel tapiz rayado y un armario de madera visible atrás del hombro izquierdo. Otoño de 1953.
Harry Smith, pintor, archivista, antropólogo, cineasta y alquimista hermético, su última semana en el hotel Breslin de Manhattan, 12 de enero de 1985, transformando leche en leche.