…Y al parecer, su dueño somos nosotros. Siempre y cuando se entienda que nosotros en realidad significa ellos y que todos realmente significa algunos. Unos ellos y unos algunos que son exclusivamente el sindicato de PEMEX y un puñado de concesionarios. Por así haberlo decidido la historia patria, a ellos, y sólo a ellos, se les ha entregado el usufructo de las palabras nosotros y todos.
De esta manera, nosotros los dueños (que en realidad son ellos), que somos todos(o sea algunos), estamos empeñados en que el petróleo logre su final democratización.
Esta democratización consiste en lograr que se acabe.
Una vez que se acabe, el petróleo pasará a ser de nadie (pues no se puede tener propiedad sobre algo que no existe), siempre y cuando se entienda que nadie significa todos. Todos nosotros, que seremos democráticamente dueños de absolutamente nada. Pero eso sí: una nada que nadie podrá quitarnos. Una nada cien por ciento mexicana.
Todos y algunos, nosotros y ellos, defendiendo a la Patria hasta lograr que implosione en una absoluta, deslumbrante posesión de sí misma.
Es un escritor, editorialista y académico, especialista en poesía mexicana moderna.
