Como pocos escritores de su generación, el chihuahuense Jesús Gardea reconoció en su propia mirada y en la morosa circulación del mundo circundante la necesaria fuerza para desplegar y cumplir una obra. Gardea, lejos de los círculos intelectuales comúnmente conocidos e influyentes, labró una narrativa que cifraría las soledades compartidas, los silencios apenas interrumpidos, el ritmo seco de su Norte mexicano. Lo hizo con radical fidelidad a un lenguaje que correspondiera a la quietud apenas interrumpida de su geografía y que mantuviera ritmos precisos, de corta extensión y de amplios ecos. Consiguió de tal modo una obra singular y de atractiva fuerza en la mayor parte de sus libros, los que libran con fortuna el riesgo de la monotonía. Destacan en esta original obra narrativa las novelas El sol que estás mirando, El tornavoz, Soñar la guerra, Los músicos y el fuego, El ojo del diablo, así como los cuentos de Los viernes de Lautaro, Septiembre y los otros días, Las luces del mundo, De alba sombría. –
Ensayista y editor. Actualmente, y desde hace diez años, dirige la revista Cultura Urbana, de la Universidad Autónoma de la Ciudad de México