Rosa y Angelina: la vieja violencia

Es inevitable conjeturar si el bullying no es resultado de una cadena de violencias previas.ย 
Aร‘ADIR A FAVORITOS
ClosePlease loginn

Circulรณ un video en las redes la semana pasada, de esos filmados con un telรฉfono. La escena sucede en la Secundaria Tรฉcnica 42 del Distrito Federal, y muestra a una muchacha que es muy violentamente tironeada y golpeada por otra.

La vรญctima se llama Angelina, tiene 16 aรฑos, es indรญgena mixteca. La misma edad tendrรก la golpeadora, que se llama Rosa. Unos muchachos le cubrieron la cabeza a Angelina con un suรฉter para golpearla con ventaja. Estos tipos no aparecen en el video, pero aportan la banda sonora: carcajadas cruzadas con hipo, los gruรฑidos hoscos que piden mรกs violencia. Cuando alguien logra apartarla, Rosa lanza un รบltimo, certero puntapiรฉ a la boca de Angelina. Alguien se acerca y la obliga a mostrar el rostro ensangrentado.

Horas mรกs tarde, el video estรก en Youtube, pero no como denuncia sino como baladronada: fue filmado por una aliada de la agresora. En una pรกgina de facebook, la agresora y la videoasta se ufanan de la pericia que mostraron en la reyerta.

Angelina saliรณ bien librada: tiene heridas que “dejan cicatriz” (esa rara categorรญa legista) pero no sufriรณ lo que muchas otras vรญctimas de bullying que documenta la internet en Mรฉxico: un amplio catรกlogo de crueldad juvenil, de una ferocidad rayana en lo inverosรญmil; la versiรณn juvenil de la sevicia narca. Angelina tuvo tambiรฉn el dudoso beneficio de la “justicia” pues como hubo agravante de racismo la prensa sacudiรณ a la mala conciencia mexicana (tan racista que abraza cualquier causa que la enmascare un poco): el caso llegรณ a la procuradurรญa, se citรณ a las autoridades de la escuela, se localizรณ a las agresoras.

Poco a poco (hay que reconocerlo) el sistema educativo y judicial se atarea en combatir esas conductas atroces. ¿Serรก posible en un paรญs tan dominado por formas de violencia pรบblica, de la que la privada es, a la vez, germen y eco? Ojalรก que logrรกsemos impedir que para los niรฑos y los adolescentes la violencia sea, tambiรฉn, mรกs un hรกbito que una anomalรญa; que la violencia no se convierta en ese “recurso dialรฉctico” a la mexicana que deplorรณ Octavio Paz en El laberinto de la soledad

Porque no es exclusiva de Mรฉxico, claro estรก, pero entre nosotros es superior: segรบn un estudio de la OCDE, Mรฉxico es el paรญs con mayor รญndice de bullying entre 24 paรญses estudiados: el 69% de los adolescentes lo han sufrido. Y segรบn el INEGI (2007) el 78% de las mujeres de Jalisco, el DF y el Edomex han sido golpeadas.

Es inevitable conjeturar si la violencia que exhibe Rosa no resultarรก de otra violencia, la que pudo sufrir en su casa, o el barrio, o tambiรฉn en la escuela, asestada por padres, hermanos, vecinos o compaรฑeros, eslabones de una violencia plausiblemente ancestral: ni los aztecas ni los espaรฑoles se caracterizaban por su repugnancia al sufrimiento ajeno.

(Una nota al margen: segรบn el doctor Guillermo Haro y Paz, su primo Octavio fue repetidamente vรญctima de bullying en el Colegio Francรฉs del Zacatito. Cuando ingresรณ a primer aรฑo “los niรฑos lo molestaban y golpeaban” porque era “bonito y atildado” y le causaron “muchos sinsabores”. Guillermo, que era dos aรฑos mayor, lo defendรญa pero Octavio “tuvo que pelear muchas veces”. Y es curioso, porque era un hostigamiento que tambiรฉn emanaba del lodo racista, pues sus compaรฑeros lo acusaban de extranjero…)   

“La crueldad es un placer”, escribe Paz en un artรญculo de 1943. “Mediante el ejercicio de la crueldad el hombre obtiene un extraรฑo estremecimiento, un goce helado y una satisfacciรณn indudable. Cuando alguien derrama sangre, no por necesidad ni impelido por fuerzas superiores a su espรญritu, sino libremente, afirma su propia vida. Ver morir a otro es, ante todo, afirmar la propia vida; humillar al extraรฑo es, tambiรฉn, una afirmaciรณn de nuestro valer, conseguida gracias a la degradaciรณn del otro.”  

¿Cรณmo explicar esto a la pequeรฑa Angelina, tirada ahรญ en el suelo, cubriรฉndose el rostro, vejada y humillada, escuchando las carcajadas, en perfecta soledad? Mรกs difรญcil todavรญa… ¿cรณmo explicรกrselo a Rosa?

 

 

+ posts

Es un escritor, editorialista y acadรฉmico, especialista en poesรญa mexicana moderna.


    ×

    Selecciona el paรญs o regiรณn donde quieres recibir tu revista: