Señor director:
En relación a la información publicada en la edición de junio de su importante revista, en la sección “Cartas”, y que toma como fuente información proporcionada por Agar García y Leonardo da Jandra, esta Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) se permite formular las siguientes precisiones:
Reconocemos la invaluable labor de los grupos ambientalistas de Oaxaca que generaron y propiciaron las condiciones para el decreto, en 1998, del Parque Nacional Huatulco, y donde tuvieron destacada actuación García y Da Jandra, quienes lucharon incansablemente por alcanzar este objetivo.
Sin embargo, es importante hacer algunas aclaraciones a información difundida a partir de la propuesta de modificación del polígono de ese Parque Nacional, que fue publicada el 22 de abril mediante un aviso en el Diario Oficial de la Federación.
La Conanp se deslinda de la problemática que enfrentan ambas personas con el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) respecto a la ubicación y propiedad legal de la casa ubicada en el paraje conocido como Punta Maguey.
En lo que compete a las atribuciones y función de esta Comisión, agradecemos y respetamos el interés y el trabajo desarrollado en favor del Parque Nacional Huatulco y esperamos que a la vez se reconozcan las ganancias significativas para la conservación que refleja la propuesta de modificación:
1. Se amplía en 272 hectáreas netas la superficie del Parque.
2. La propuesta de la Conanp “no desincorpora una parte considerable del Parque Nacional correspondiente al valle de Cacaluta para cederlo a Fonatur”. El valle de Cacaluta no está incorporado al Parque Nacional y la Conanp no puede ceder tierras que no son suyas.
3. Por el contrario, la propuesta de modificación de la Conanp contempla proteger precisamente el 60% del paraje conocido como Cacaluta, hasta hoy fuera del Parque, incluyendo el 100% del humedal de enorme valor ecológico, reclamo de la sociedad civil y conservacionistas de Huatulco y México desde la creación del Parque.
4. Se mantiene dentro del polígono del área protegida al humedal de Zanate, también de gran valor.
5. La modificación propuesta no afecta la representatividad de las especies de vida silvestre o de hábitats, ni genera efectos negativos a nivel de ecosistema.
6. Se desincorporan ocho hectáreas de un basurero a cielo abierto, obteniéndose el compromiso de reubicar el tiradero y de remediar el sitio. Las tierras del nuevo basurero han sido ya ubicadas y se está desarrollando un estudio contratado por la UNAM para garantizar que se cumpla con lo establecido en la NOM-083-SEMARNAT-2003 “Especificaciones de protección ambiental para la selección del sitio, diseño, construcción, operación, monitoreo, clausura y obras complementarias de un sitio de disposición final de residuos sólidos urbanos y de manejo especial”. Es inaceptable plantear que ese tiradero siga ahí, dentro del Parque Nacional, y a escasos metros de la zona urbana.
7. Se obtiene en donativo de Fonatur la propiedad de la tierra de toda la porción terrestre del Parque. De esta forma, y a partir de ahora, no habrá riesgos de propuestas de cambio de uso de suelo, ni se autorizarán construcciones permanentes, puesto que ahora la Nación es dueña de la tierra.
No dejo de mencionar que en la propuesta realizada por la Conanp se ha privilegiado en todo momento la ganancia para la conservación.
Por último cabe la posibilidad de seguir bajo el statu quo, lo que implicaría que la zona de Cacaluta quede en su totalidad fuera del Parque Nacional, el tiradero a cielo abierto continúe ubicado dentro del polígono y sin acciones de remediación, y la propiedad de la tierra quede en favor de Fonatur. Esta también es una opción, de hecho, que tristemente puede regresar si se pierde esta estupenda oportunidad.
Agradeciendo su atención a la presente, me permito solicitar su publicación con la finalidad de evitar confusiones entre sus lectores. Atentamente, ~
comisionado nacional de la CONANP.
