Marcos Moshinsky (1921-2009)

El pasado mes de abril muriรณ Marcos Moshinsky, el fundador de la fรญsica nuclear en Mรฉxico. Dos de sus colegas, uno desde el Instituto de Ciencias Nucleares de la UNAM y el otro desde El Colegio Nacional, hacen una doble valoraciรณn del hombre y el cientรญfico.
Aร‘ADIR A FAVORITOS
ClosePlease loginn

Arquitecto de la ciencia mexicana

 

Nos ha dejado Marcos Moshinsky, pionero y pilar de la fรญsica en nuestro paรญs. Investigador excepcional, maestro de varias generaciones de cientรญficos, forjador incansable y arquitecto de la ciencia mexicana, fundador de escuelas y academias y uno de los cientรญficos mรกs influyentes en la historia de Mรฉxico, falleciรณ el 1ยบ de abril de 2009, a punto de cumplir 88 aรฑos. Paradigma del cientรญfico y acadรฉmico universal, su legado permanecerรก en la memoria histรณrica de Mรฉxico y de la UNAM, que lo reconoce como uno de sus hijos predilectos. De acuerdo con la opiniรณn de cientรญficos de otras latitudes, es difรญcil encontrar otro caso de una persona que haya tenido tanto impacto en el desarrollo cientรญfico de un paรญs.

Desde 1947, aรฑo en que Moshinsky publicรณ su primer artรญculo, hasta el presente, su producciรณn cientรญfica en fรญsica apareciรณ en las mejores revistas del mundo, alcanzando cerca de trescientas publicaciones, incluyendo cinco libros que han recibido mรกs de cinco mil referencias formales en la literatura universal. Moshinsky ha sido, sin duda, el fรญsico mexicano mรกs conocido en el mundo.

A Moshinsky se le otorgaron todos los premios cientรญficos de Mรฉxico e importantes reconocimientos internacionales, entre los que destacan el Prรญncipe de Asturias (1988), el Bernardo Houssay (1990), el Ciencias UNESCO (1997) y lo que se considera el mรกximo galardรณn en el รกrea de la simetrรญa y la teorรญa de grupos, la medalla Eugene Wigner, otorgada a Moshinsky en Hobart, Australia, en julio de 1998. Formรณ parte de once academias cientรญficas, incluyendo El Colegio Nacional, la Academia Pontificia de Ciencias y la American Academy of Arts and Sciences. Fue el editor fundador de la Revista Mexicana de Fรญsica, de 1952 a 1967, y de la Escuela Latinoamericana de Fรญsica. Dirigiรณ a mรกs de cuarenta estudiantes de licenciatura, maestrรญa y doctorado, y a una decena de investigadores posdoctorales.

 

โ– 

 

A su regreso de Princeton, en 1949, donde obtuvo el doctorado bajo la direcciรณn del premio Nobel de Fรญsica Eugene Wigner, el joven Moshinsky empezรณ a reunir a su alrededor a un grupo de jรณvenes que constituirรญan la primera generaciรณn de fรญsicos profesionales y de nivel internacional formados en el Instituto de Fรญsica de la UNAM. Sus primeros trabajos en el escenario mundial tuvieron que ver con los fundamentos de la mecรกnica cuรกntica. En uno de ellos, publicado en 1952 y que tenรญa por tรญtulo โ€œDifracciรณn en el tiempoโ€, se hacรญa una curiosa predicciรณn relacionada con la evoluciรณn de una partรญcula inicialmente confinada en una regiรณn del espacio. La partรญcula debรญa sufrir una especie de dilema shakespeareano: oscilar entre la existencia y la no existencia o, mรกs precisamente, entre la posibilidad de ser encontrada o no. En aquella รฉpoca ese extraรฑo resultado no podรญa verificarse experimentalmente y parecรญa estar destinado a permanecer como una idea o un โ€œexperimento pensadoโ€. Sin embargo, para regocijo de los fรญsicos mexicanos, las predicciones de Moshinsky fueron verificadas mediante delicados experimentos con neutrones 45 aรฑos despuรฉs de su formulaciรณn.

La pasiรณn de Moshinsky, sin embargo, su verdadero amor en el campo de la ciencia y el que le dio fama internacional, fue el hermoso lenguaje matemรกtico de la fรญsica conocido como la teorรญa de grupos, que es la teorรญa matemรกtica de la simetrรญa en la naturaleza. Moshinsky se convirtiรณ en uno de los mรกs importantes expositores a nivel mundial de esta poderosa herramienta cientรญfica, logrando notables aplicaciones en la fรญsica atรณmica, molecular y nuclear. Los โ€œparรฉntesis de Moshinskyโ€ o moshinskets, que Moshinsky inventรณ y Tomรกs Brody evaluรณ numรฉricamente en 1960, utilizando la primera computadora que existiรณ en Mรฉxico, revolucionaron los cรกlculos nucleares de la รฉpoca y pusieron a la UNAM en el mapa de la fรญsica mundial.

Su trabajo en el tema de la simetrรญa en la naturaleza tuvo tambiรฉn otras expresiones. Al conocer al pintor David Alfaro Siqueiros, hablaron sobre el famoso mural en Bellas Artes, Mural y libertad. El escritor Josรฉ Gordon narra asรญ el encuentro del cientรญfico y el muralista:

 

 

Siqueiros le proporcionรณ unas fotografรญas de cuadros relativamente pequeรฑos en comparaciรณn con el mural, donde estaba la arquitectura oculta de la obra, las simetrรญas que conforman el ritmo y la estructura del mural. En la ciencia, dice Moshinsky, hay una situaciรณn similar: el objetivo es entender aquello que estรก detrรกs de lo que vemos, las simetrรญas ocultas de la naturaleza.

 

 

โ– 

 

Tuve la fortuna de encontrarme con Moshinsky hace casi 35 aรฑos, cuando asistรญ a su curso de mecรกnica cuรกntica en la vieja Facultad de Ciencias de la UNAM. En esa รฉpoca vi su nombre en una convocatoria para hacer tesis de licenciatura en fรญsica nuclear. Fui al dรฉcimo piso de la antigua Torre de Ciencias y le preguntรฉ si me aceptarรญa como su estudiante. Me observรณ en forma detenida e hizo algunas consultas, para luego abrir la puerta a lo que serรญa la relaciรณn acadรฉmica mรกs importante de mi vida. Moshinsky rรกpidamente me revelรณ su secreto para el รฉxito en la ciencia: pasiรณn, talento y trabajo, mucho trabajo. Los seminarios con รฉl podรญan durar varias horas, tener lugar en el instituto, en su casa o en un cerro, en las instalaciones del Centro Nuclear de Salazar (denominado el โ€œseminario de mรกs alto nivel en el mundoโ€), los sรกbados y domingos o el dรญa de aรฑo nuevo. Lo mรกs extraordinario era que รฉl hacรญa la mayor parte del trabajo de pie, frente al pizarrรณn. En un discurso que pronunciรณ en ocasiรณn de su sexagรฉsimo aniversario comparรณ la interacciรณn con sus estudiantes a una partida de tenis. Al principio, dijo, el estudiante suele no devolver la pelota o hacerlo suavemente a lugares previsibles. Afirmรณ que uno de sus mayores placeres era el momento en que el โ€œtenistaโ€ comenzaba a devolver la pelota fuertemente a lugares inesperados. Sabรญa entonces que tenรญa frente a sรญ a un verdadero investigador en ciernes.

En su casa de Copilco, Moshinsky tenรญa una singular colecciรณn de cuadros que contienen las firmas de cientos de fรญsicos, desde premios Nobel hasta simples mortales (con un grado en fรญsica) que lo han visitado a lo largo de los aรฑos. Estรกn ahรญ las rรบbricas de Robert Oppenheimer, Eugene Wigner, Richard Feynman, Abdus Salam y muchos otros. Como seรฑalรณ Jorge Flores en un testimonio reciente, esas firmas son un registro indirecto de la historia de la fรญsica en Mรฉxico durante la segunda mitad del siglo XX y los comienzos de este, ademรกs de que dejaban traslucir la firme convicciรณn de Moshinsky de que la ciencia sรณlo puede concebirse como una actividad internacional. โ€œNo existe una ciencia nacionalโ€, decรญa Antรณn Chรฉjov, โ€œcomo no existe una tabla de multiplicaciรณn nacionalโ€.

Sin duda, Moshinsky ha sido determinante para la internacionalizaciรณn de la ciencia en Mรฉxico. De ello dan fe sus cuadros, testigos silenciosos de la vocaciรณn universal del maestro. Ademรกs, Moshinsky nunca se aislรณ de la sociedad en que vivรญa; siempre manifestรณ con valentรญa y claridad sus ideas, tanto sobre temas cientรญficos como de carรกcter general. Esta faceta de su actividad tambiรฉn fue reconocida internacionalmente. En 1991 recibiรณ la medalla Andrรฉi Sรกjarov por su apoyo a los derechos humanos en la Uniรณn Soviรฉtica durante los aรฑos setenta y ochenta. Serรญa difรญcil registrar aquรญ las mรบltiples facetas, como cientรญfico y como ser humano, de Moshinsky. Me parece, sin embargo, que aquellos que tuvimos la fortuna de conocerlo como maestro, colega y amigo destacarรญamos su extraordinaria generosidad.

 

โ– 

 

Transcribo aquรญ la traducciรณn de una carta que el profesor John Archibald Wheeler, cรฉlebre fรญsico de la Universidad de Princeton, enviรณ a Moshinsky en ocasiรณn de su cumpleaรฑos setenta:

 

 

Querido Marcos:

ยฟLlegaste a los setenta? ยกNo puedo creerlo! O, como exclamรณ la seรฑora de Niels Bohr cuando se enterรณ de que Robert Frisch estaba por retirarse: โ€œNo puedo entenderlo. Todos los jรณvenes que conozco se estรกn retirando.โ€ Tรบ, estoy seguro, no te estรกs retirando ni lo harรกs jamรกs. Tienes demasiado impulso creativo, demasiado amor por nuestra maravillosa disciplina. Quiero agradecerte especialmente tres cosas: has hecho que la teorรญa de grupos tenga impacto en casi todas las ramas de la fรญsica; has educado a tres generaciones de cientรญficos de ese gran paรญs al que he tenido especial afecto a lo largo de mi vida; y, por รบltimo, pero no menos importante, has alcanzado un lugar muy especial en los corazones de tus antiguos colegas de Princeton, incluyendo a Eugene Wigner y a mรญ.

 

 

No se equivocaba Wheeler. En los casi dieciocho aรฑos transcurridos desde entonces, Marcos Moshinsky continuรณ su labor acadรฉmica con la misma energรญa, inteligencia y pasiรณn de siempre; nunca se retirรณ, asistiรณ a su oficina en la UNAM y siguiรณ realizando investigaciรณn hasta pocas semanas antes del final de su prolรญfica existencia.

La simetrรญa fue uno de los temas fundamentales en su vida. Me parece que รฉl mismo y el legado de su vida dedicada a la ciencia personifican mejor que nadie la simetrรญa, el balance y la armonรญa a que todos aspiramos. Seguirรก siendo una inspiraciรณn para las nuevas generaciones de cientรญficos en nuestro paรญs. ~

โ€“ Alejandro Frank

 

 

 

 

Una gran figura

 

โ€œCuando fallece un alto personaje de la farรกndula o la polรญtica, las demostraciones de dolor, reales o fingidas, rayan en ocasiones con lo grotesco. En cambio el deceso de una alta personalidad cientรญfica pasa casi inadvertido para los medios de comunicaciรณn y el pรบblico en general. Ese desequilibrio refleja la ignorancia en Mรฉxico sobre lo que es la ciencia, asรญ como sobre los que realizan esa labor, olvidando que sin dicha actividad el paรญs no puede aspirar a un futuro mejor.โ€

Estas frases, tan reales y reveladoras de la sociedad mexicana, fueron escritas en 1991 por Marcos Moshinsky con motivo del fallecimiento del probablemente mejor matemรกtico que ha dado este paรญs, Josรฉ รdem, ocurrido el 14 de febrero de dicho aรฑo. Este 2009, dieciocho aรฑos despuรฉs, fallece Marcos y sus palabras nos duelen. Nada de lo que dijo ha cambiado un รกpice y posiblemente, al paso que vamos, nunca cambiarรก. Sirva este modesto texto para rendir un justo homenaje a una de las mรกs grandes figuras cientรญficas que ha dado este paรญs.

No me cabe a mรญ en lo personal la menor duda de que el pionero, el precursor de la fรญsica teรณrica en Mรฉxico fue Marcos Moshinsky. Cierto, hubo otras grandes figuras en el paรญs antes que รฉl, Manuel Sandoval Vallarta, Alfredo Baรฑos y Carlos Graef Fernรกndez, entre otros, pero ninguno le dejรณ a la fรญsica en Mรฉxico un legado como el que nos heredรณ Marcos. Su obra cientรญfica es no sรณlo enorme sino muy valiosa. Hoy estรก contenida en los diez volรบmenes que sobre ella ha editado El Colegio Nacional. Su obra habla por sรญ misma y no la tocarรฉ aquรญ. Otros, mรกs calificados para ello, lo harรกn seguramente en un futuro cercano.

Mi propรณsito es resaltar cรณmo la personalidad de este gran cientรญfico trascendiรณ a otros campos del conocimiento fuera de su especialidad y a problemas relacionados con temas de gran trascendencia social. Para ello harรฉ un poco de historia: conocรญ al profesor Moshinsky cuando en 1952 realizaba mi tesis para recibirme de quรญmico. A sugerencia de mi director de tesis optรฉ por obtener una ayudantรญa de investigador en el Instituto Nacional de la Investigaciรณn Cientรญfica (INIC), para lo cual tuve que exponer el contenido de mi trabajo en el famoso seminario de los viernes que dirigรญa Manuel Sandoval Vallarta. Ese seminario, por cierto, todavรญa existe con el nombre de don Manuel y tiene lugar los viernes por la tarde en el Instituto de Fรญsica de la UNAM. Durante la exposiciรณn, cuyo contenido nada tenรญa que ver con la especialidad del profesor Moshinsky, me hizo varias preguntas mostrando interรฉs en el trabajo. Dos aรฑos despuรฉs fui su alumno regular en la materia de mecรกnica cuรกntica que impartรญa en el รบltimo aรฑo de la licenciatura en fรญsica. Por primera vez en mi carrera vivรญ la experiencia de aprender una materia un tanto difรญcil de una persona que ademรกs la exponรญa dentro del contexto mismo de su propio trabajo de investigaciรณn.

ร‰l entonces estaba dedicado al estudio del llamado modelo de capas del nรบcleo atรณmico. Terminรฉ exitosamente el curso sin mostrar ningรบn interรฉs en particular en dedicarme a ese tema. Mi mente estaba en otras cosas. Pero eso no fue obstรกculo para que un aรฑo mรกs tarde Marcos me diera una excelente carta de recomendaciรณn para irme a la Universidad de Maryland, donde trabajaban algunos especialistas en el tema de mi interรฉs, la fรญsica estadรญstica. Si bien para muchas personas esta anรฉcdota puede no ser muy singular, para mรญ sรญ lo fue. Un gran profesor, รกvido de captar buenos estudiantes para que colaboraran en su trabajo, no titubeaba en impulsar a otros jรณvenes aunque fueran a incursionar en otros campos.

Esta actitud fue siempre un rasgo muy caracterรญstico de la personalidad de Marcos: reconocer la calidad cientรญfica de los jรณvenes, pero sin ataduras de ningรบn tipo. Lo que no perdonaba era la mediocridad, mรกs cuando esta iba acompaรฑada de tintes oportunistas y politiqueros. Sus mรบltiples escritos al respecto seรฑalando el terrible mal que sufriรณ la UNAM desde 1966 muestran e ilustran este aspecto de su carรกcter. Lo dijo con toda claridad en una entrevista que le hicieron en 2001: โ€œA partir de la renuncia del rector Chรกvez en la Universidad, se acentuรณ la politizaciรณn que tanto la ha afectado.โ€ Y desde esta perspectiva no se cansaba de repetir lo que tanto seรฑalรณ en vida don Manuel Sandoval Vallarta: es esencial para Mรฉxico llegar a tener una gran tradiciรณn cientรญfica (ยกsรณlo asรญ se eliminan los cacicazgos!).

Aunque podrรญa relatar muchas anรฉcdotas similares, por razones de espacio sรณlo voy a resaltar su interรฉs por los problemas de รญndole socioeconรณmica. En 1981, unos aรฑos despuรฉs de que el famoso Club de Roma anunciara la llamada โ€œcrisis energรฉticaโ€, y a raรญz de una de tantas discusiones de sobremesa que tenemos en El Colegio Nacional, pensamos Marcos y yo en llevar adelante una idea del entonces director del Programa Universitario de Energรญa, Mariano Bauer, de abrir un foro de discusiรณn pรบblica sobre la situaciรณn que prevalecรญa en el paรญs acerca del aprovechamiento y explotaciรณn de sus mรบltiples recursos energรฉticos. Esto nos llevรณ a organizar un ciclo de conferencias impartidas por especialistas en los diversos temas elegidos para entender si existรญa o no una planeaciรณn energรฉtica en el paรญs. Los resultados, imposibles de analizar aquรญ, estรกn contenidos en una obra, todavรญa hoy vigente, intitulada Planeaciรณn energรฉtica en Mรฉxico / ยฟMito o realidad?. La participaciรณn muy crรญtica y entusiasta de Moshinsky se refleja en el epรญlogo de la obra, del cual sรณlo quiero reproducir dos fragmentos:

 

 

Planear es definir ahora las acciones que deberรญamos realizar ordenadamente en el futuro para acercarnos de manera progresiva a un estado deseable de cosas. Esta formulaciรณn lleva implรญcita la necesidad de un diagnรณstico de la situaciรณn actual y la definiciรณn de un estado deseable […] De allรญ que los esfuerzos realizados en este sexenio, algunos de ellos muy elaborados, han pasado en muchos casos de tener objetivos realistas, a ser meros mitos.

 

 

No creo que, en los veintisรฉis aรฑos que han transcurrido desde entonces, la situaciรณn haya cambiado mucho. Esta es, de nuevo, la gran tragedia de nuestro paรญs: prevalece, como decรญa un gran poeta, el arte de hablar mucho sin decir nada. Y a ello le podrรญa agregar: y sin hacer mucho.

Escribiรณ tambiรฉn Marcos:

 

Mรฉxico cuenta con recursos humanos en algunas de sus universidades y centros de investigaciรณn, ademรกs de recursos materiales […] muchos energรฉticos. Depende de nosotros el aprovechar estos recursos para remontar la dura pendiente que el futuro inmediato nos presenta.

 

 

La pรฉrdida para el paรญs de un hombre de su talla, cientรญfico y humanista, es invaluable. Sin embargo, para el resto de nuestra sociedad, salvo para los que lo tuvimos cerca, pasarรก inadvertida.

 

 

Descansa en paz, Marcos, somos muchos los que admiramos y respetamos tu labor en y para Mรฉxico. ~

โ€“ Leopoldo Garcรญa-Colรญn Scherer

 

+ posts

(Monterrey, Nuevo Leรณn, 1951) es un fรญsico, investigador, catedrรกtico y acadรฉmico mexicano, especializado en fรญsica nuclear y molecular. Es miembro de El Colegio Nacional.โ€‹


    ×

    Selecciona el paรญs o regiรณn donde quieres recibir tu revista: