Con la difusiรณn, en su conferencia de prensa matutina, de datos de publicidad oficial y suscripciones de Letras Libres, el presidente de Mรฉxico incurre, de nuevo, en una difamaciรณn. Insiste en utilizar la tribuna presidencial, con todo el poder que ello confiere, para desprestigiar voces crรญticas y confundir a la opiniรณn pรบblica, haciendo creer a su audiencia que la publicidad oficial que reciben los medios es indebida.
Esto no es verdad. Se pueden y deben debatir sus reglas y sus mรฉritos en Mรฉxico, pero la publicidad oficial no es ilegal. Tampoco significa falta de rectitud. En nuestro caso y el de otras publicaciones crรญticas atacadas recientemente, la correlaciรณn automรกtica que sugiere el presidente es malintencionada y falsa.
Cada peso de publicidad oficial que ha recibido Letras Libres es pรบblico, legal, legรญtimo y ha servido para dar voz y espacio a autores de todas las tendencias polรญticas. El archivo histรณrico de la revista prueba que Letras Libres ha publicado textos crรญticos sobre los gobiernos anteriores, igual que hace y harรก con el actual. Nunca un anuncio ha inhibido ni inhibirรก la independencia crรญtica de la revista.
La publicidad oficial, hasta antes de este gobierno, representรณ apenas 2 de cada 10 pesos de nuestros ingresos. Hoy en dรญa representa aรบn menos. El resto proviene de anunciantes y patrocinios privados, asรญ como de los lectores que nos siguen con regularidad y lealtad en Mรฉxico, Amรฉrica Latina, Espaรฑa y el resto del mundo, a travรฉs de nuestro sitio web.
Los ingresos de Letras Libres son pรบblicos y estรกn disponibles en este enlace.
Letras Libres tambiรฉn ha vendido suscripciones, gracias a las cuales bibliotecas pรบblicas de todo el paรญs pudieron consultar una revista que ha tenido en sus pรกginas a muchos de los pensadores y escritores mรกs importantes de Mรฉxico y el mundo. En 2017 hicimos la donaciรณn a esas mismas bibliotecas de 237,000 revistas, mil por cada nรบmero desde nuestro nacimiento en enero de 1999. Solo un gobierno empeรฑado en calificar el periodismo y el pensamiento crรญticos como una actividad ilegรญtima exhibirรญa la presencia de revistas en bibliotecas como una actividad sospechosa.
El presidente de Mรฉxico harรญa bien en abandonar su voluntad cotidiana de distracciรณn en un momento en el que el paรญs enfrenta una situaciรณn crรญtica. Con 67 mil personas fallecidas como consecuencia de la pandemia, el desplome de la economรญa y el empleo, la alarmante inseguridad y la corrupciรณn de su cรญrculo cercano, el presidente no tiene tiempo que perder. El paรญs, mucho menos.
Letras Libres, en su versiรณn impresa y digital, seguirรก publicando ideas en libertad y defendiendo la democracia, como lo ha hecho desde hace veintiรบn aรฑos, y como lo hicieron las revistas Vuelta y Plural, que nos antecedieron. Medio siglo de historia nunca se podrรก borrar. No nos intimidarรกn.