No respires pertenece a la categoría de los sleeper hits: películas que llegan a cartelera sin mucho ruido y terminan por desbancar a producciones más grandes. Se trata de un thriller que manipula las lealtades del espectador con los personajes, invirtiendo los roles tradicionales en las películas que giran en torno a invasiones a casas: aquí no se puede asegurar que los invasores sean culpables ni que el invadido sea una víctima.
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Cine aparte: No respires
El segundo largometraje del uruguayo Fede Álvarez es un thriller que va contra algunas convenciones del género.