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DiabĆ³lica tentaciĆ³n, de Karyn Kusama

La guionista Diablo Cody (su ā€œnombre artĆ­sticoā€ de cuando era teibolera) obtuvo notoriedad con la historia de Juno, y se ganĆ³ todos los premios cinematogrĆ”ficos de la temporada 2008 (incluido un Oscar). Su siguiente proyecto despertĆ³ expectativa, sobre todo porque se trataba de una pelĆ­cula de gĆ©nero. El tĆ­tulo original (JennifferĀ“s Body) hace referencia a una canciĆ³n de Hole, el grupo de Courtney Love, lo que le granjeĆ³ las simpatĆ­as de la generaciĆ³n crecida en los noventa. Por si fuera poco, la elecciĆ³n de Megan Fox ā€“la chica sexy del momento en Hollywoodā€“ como protagonista, terminĆ³ de disparar los bonos de la cinta. Y la verdad es que el resultado no decepciona, aunque tampoco resultĆ³ ser algo mĆ”s que uno de tantos filmes que se producen en la Meca del Cine. Hay gore, escenas cachondas, referencias generacionales, sarcasmo y, especialmente, una exploraciĆ³n de la sexualidad adolescente, que es ya el sello de Cody. La pelĆ­cula es entretenida, pero si la guionista sigue apegĆ”ndose a las reglas hollywoodenses, terminarĆ” perdiendo toda la frescura que tenĆ­a su original guiĆ³n debut.

Bastardos sin gloria, de Quentin Tarantino

ĀæTarantino haciendo una pelĆ­cula de nazis? ĀæPor quĆ© Ć©l, entre todos los cineastas posibles, tenĆ­a que abordar un tema tan trillado? Las dudas se disipan viendo el filme: su estilo estĆ” ahĆ­, intacto, y resolviĆ³ con solvencia los retos que le presentaba una cinta histĆ³rica. El principal de ellos eran los diĆ”logos, parte de su patrimonio cinematogrĆ”fico. AquĆ­ no podĆ­a utilizar el eslang y la cadencia del lenguaje de sus pelĆ­culas ā€œcontemporĆ”neasā€, plagadas ademĆ”s de referencias a la cultura popular. Pero la genialidad de su verborrea se ve fortalecida ante el contexto histĆ³rico: hay secuencias muy largas sostenidas enteramente por conversaciones en las que alcanza una soberbia tensiĆ³n dramĆ”tica, y mucho tienen que ver los uniformes ā€“y lo que significanā€“ que portan los protagonistas. Decir que Tarantino suele arrancar interpretaciones memorables a sus actores es una obviedad, pero en este caso obtuvo oro molido del austriaco Christoph Waltz, quien se llevĆ³ merecidamente el premio al mejor actor en el pasado Festival de Cannes, por su encarnaciĆ³n del malĆ©volo y adorable coronel Hans Landa. ĀæY Brad Pitt? Apenas aparece, por fortuna ā€“se necesitaba un rostro taquillero en medio de tantos desconocidosā€“ en este pastiche histĆ³rico-pop con tintes de ucronĆ­a (hay que ver lo que pasa al final con Hitler), en el que Tarantino demuestra que lo que menos le interesa es encasillarse.

Nueve, de Shane Acker

El director Shane Acker fue nominado en el 2006 a un Oscar por la versiĆ³n corta de esta cinta animada y apocalĆ­ptica. MĆ”s tarde, Tim Burton se interesĆ³ en el proyecto y produjo la nueva versiĆ³n, que ahora llega a las pantallas corregida y aumentada. El mundo creado por Acker, en el que las mĆ”quinas han destruido la civilizaciĆ³n ā€“tema recurrente de la ciencia ficciĆ³nā€“ y en el que una serie de muƱecos de trapo salvaguardan lo que queda del espĆ­ritu humano, es oscuro e intrigante, y estĆ” poblado por singulares seres que parecen salidos de una pesadilla. Se nota, sin embargo, que la historia fue forzada para crecer, y que pudo haberse quedado perfectamente en el cortometraje que era. AĆŗn asĆ­, las atmĆ³sferas hechizan lo suficiente y convierten a esta pelĆ­cula en una experiencia cinematogrĆ”fica gozosa, digna de niƱos y adultos.

ā€“ Bernardo Esquinca

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Su libro mƔs reciente es el volumen de relatos de terror Mar Negro (Almadƭa).


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