slavoj Zizek es algo parecido a un teórico superestrella. Filósofo esloveno, autor de varios libros en los que hace una crítica lacaniana de la cultura popular (y, por ende, del capitalismo), su celebridad es tan enigmática e inescrutable como algunos capítulos de su obra. El documental Zizek!, de Astra Taylor, se regocija en esta contradicción: lo mismo muestra al filósofo ladrando sus teorías con una convicción fiera, que escondiéndose en la calle de sus fans (“la gente es siniestra”), maravillándose de que algunos porten agua en botellas de plástico (“me recuerda el socialismo”), y actuando un suicido metafísico en una escena inspirada en Vértigo (“sólo muerto la Academia me tomaría en serio”). Zizek es carismático y el documental deja ver por qué. Echa luz sobre el mass appeal de un hombre que cuestiona los alcances de la imagen, y que padece, con pesar genuino, el absurdo de su posición. –
es crítica de cine. Mantiene en letraslibres.com la videocolumna Cine aparte y conduce el programa Encuadre Iberoamericano. Su libro Misterios de la sala oscura (Taurus) acaba de aparecer en España.