Inger Christensen
Eso
Traducciรณn de Francisco J. Uriz
Mรฉxico, Sexto Piso/Conaculta, 2015, 494 pp.
Cuando Herta Mรผller supo del deceso de su amiga Inger Christensen en 2009, dijo que habrรญa preferido esperar mรกs tiempo antes de que se le entregara el Premio Nobel y ver en cambio a Christensen, la poeta danesa mรกs importante del siglo XX, coronada en Estocolmo. Eso no ocurriรณ, y Christensen tiene ahora un lugar en la lista de los autores que merecรญan pero nunca ganaron dicho premio.
Eso, la obra que ahora Sexto Piso pone al alcance del lector hispanohablante tras la publicaciรณn de Alfabeto, estรก divido en tres secciones: “Prologos”, “Logos” y “Epรญlogos”. “Prologos” es un canto de apariencia caรณtica que guarda una estructura interna sofisticada: consta de ocho secciones con el mismo nรบmero de versos distribuidos de forma que el primer poema, con 66 versos, es denso y acumulativo; la segunda secciรณn tiene dos poemas de 33 versos cada uno; la tercera tres poemas de veintidรณs versos; la cuarta, seis poemas de once versos; la quinta, once poemas de seis versos; la sexta, veintidรณs poemas de tres versos; la sรฉptima, 33 poemas de dos versos y la รบltima podrรญa considerarse otro poema de 66 versos o 66 poemas brevรญsimos. De este sistema uno puede permanecer ignorante durante la lectura, porque su efecto es el que tiene relevancia: un ritmo abigarrado en un inicio que va fragmentรกndose pero sin disminuir en su volumen creando un oleaje lingรผรญstico.
Esta estructura no impide a Christensen conseguir los hallazgos poรฉticos por los que su trabajo ha resistido a las modas literarias. La preocupaciรณn esencial de Eso es lo humano, sea lo que eso constituya. Sus entornos mรกs inmediatos y fรกciles de identificar: la ecologรญa (o la falta de sentido ecolรณgico moderno), la polรญtica, lo social, lo sexual, lo individual frente a lo colectivo. En la voz poรฉtica la memoria humana y social ha sido erosionada, creando casi un individuo autรณmata, imbuido, sin embargo, en el extraรฑo mundo de las relaciones y las emociones: “Alguien ha dejado de mostrar lo solo que estรก en la oscuridad. / Alguien ha desaparecido en su casa y nunca se ha visto a sรญ mismo. / Alguien estรก solo en su casa y nunca necesita a los otros. / Alguien ha desaparecido entre los otros y no ha sido visto desde entonces.”
Esta voz poรฉtica, podrรญamos decir inocente y extranjera, casi extraterrestre, se multiplica en “Logos”, que consta de tres secciones, “la acciรณn”, “el escenario” y “el texto”, cada una de las cuales se divide en ocho estancias que contienen a su vez ocho poemas. Las ocho estancias llevan los subtรญtulos: “continuidades”, “transtividades”, “simetrรญas”, “variabilidades”, “conexidades”, “universalidades”, “integridades” y “extensiones”, categorรญas gramaticales propuestas por el lingรผista danรฉs Viggo Brรธndal. En “Logos” atendemos a dos movimientos de la voz poรฉtica: uno que busca replicar su entorno moderno, desarticulado sintรกcticamente, a manera del telรฉgrafo, y que sucumbe a la modernolatrรญa: “visto รบltima vez en la pantalla / stop / en Praga / stop / leรญa en voz alta un periรณdico ruso / stop / mรกquina de subtitulado / stop / jรบbilo / stop / su obra principal / stop / sobre la quรญmica traumรกtica del sistema”.
El otro hilo conductor de Christensen es un viraje hacia la particularidad, pero no desde la expresiรณn de las vivencias personales, sino de las experiencias perturbadoras de este ser-eso, que emerge al mundo sin infancia o memoria histรณrica, y que busca, pleno en sus sentidos y capacidades intelectuales pero desnudo de sistemas o ideologรญas, el secreto de su presencia en el universo. Es este movimiento el que vincula Eso con la tradiciรณn filosรณfica de la poesรญa. Christensen aventura la formulaciรณn de una “palabra revelada” para eso. En las simetrรญas contenidas en “el texto”, plantea las parรกbolas a la creaciรณn del universo, pero aquรญ no hay dios, sino ellos, que casi por aburriciรณn crean primero la arena, donde dejan sus huellas, luego la luz, con la que aprenden a amarse los unos a los otros; en el tercer dรญa el agua, en el sexto el papel y en un รบltimo, octavo dรญa, la cama.
Esta creatividad originaria tiene su momento mรกs รกlgido y expresivo en “el texto / continuidades”, donde alguien ha sido recluido junto con otros en una instituciรณn psiquiรกtrica: “Hoy he pedido algo mรกs de papel. Utilicรฉ como excusa que ayer habรญa olvidado decirle algo a mi esposa. O si soy mujer, que habรญa olvidado decirle algo a mi marido. Solo quiero decirte que el paraรญso es un jardรญn sin lรญmites.” La locura es, por tanto, un invento del poder para desacreditar la individualidad, la heterodoxia del pensamiento, la creatividad humana natural. La poesรญa es, en esta voz, no un impulso artรญstico sino la expresiรณn de una sensibilidad particular, รบnica e irrepetible, que cuestiona un orden establecido absurdo para quien vive inmerso en el descubrimiento del universo interior: “Como tรบ sabes han inventado la hierba. Hoy alguien orinรณ en la hierba y entonces la hierba creciรณ demasiado alta, en realidad solo se permite que la hierba llegue a cierta altura.”
La voz poรฉtica repite aquรญ y allรก “es una cuestiรณn polรญtica”, pero se trata de una cuestiรณn polรญtica cuyo antรญdoto es el amor. Publicado originalmente en 1969, Eso abreva del descubrimiento social del momento: “All you need is love”. Asรญ, para comenzar a destruir el poder hay que empezar por amarlo: “entonces el amor probablemente estรก comprometido pero el poder ha quedado transformado”. En el “Epรญlogo”, eso se explica al fin a sรญ mismo su existencia, contradictoria y total, donde si el amor y el miedo se encuentran en las antรญpodas es solo porque no han logrado descifrar la compleja sintaxis que los une.
Eso goza de las caracterรญsticas de una obra de arte moderna enemiga de su modernidad: encarna el espรญritu de su tiempo mientras emprende un viaje poรฉtico hacia el centro de la conciencia y la creaciรณn humanas, aquello trascendente que un mundo sin dios parece negarnos, eso irrepetible y accidentado que nos impide morir del todo. ~
(Ciudad de Mรฉxico, 1982) se define como "onirista". Por su segundo libro de poesรญa, Trรกnsito (Fonde Editorial Tierra Adentro, 2011), obtuvo el Premio Nacional de Poesรญa Carlos Pellicer.