La estrategia de Pedro Sรกnchez ha funcionado. El PSOE, que hace menos de un aรฑo tenรญa 84 escaรฑos y unas posibilidades de crecimiento muy bajas, ha obtenido 123 diputados en las elecciones del 28 de abril. Su principal adversario, el PP, ha sufrido una derrota dramรกtica y ha perdido 71 diputados (pasa de 137 a 66). La OPA de Ciudadanos al PP (que le ha arrebatado no solo argumentario sino candidatos) estรก cada vez mรกs cerca y el partido se ve como lรญder de la oposiciรณn del centroderecha ante la catรกstrofe del PP (Cs estรก a 9 escaรฑos del PP, con 57 escaรฑos). Aunque Pablo Casado lleva solo 10 meses como secretario general del partido, hay quienes piden su dimisiรณn por los bajos resultados.
La campaรฑa del gobierno ha explotado el miedo ante la ultraderecha y ha contribuido a su crecimiento, pero Vox entra en el parlamento con 24 escaรฑos, menos de lo que se esperaba pero ajustado a las encuestas. Es un buen resultado para el partido, que no tenรญa representaciรณn parlamentaria y ha hecho una campaรฑa amateur y con poca presencia en los medios.
El miedo a la extrema derecha ha contribuido al crecimiento de los nacionalismos catalรกn y vasco: ERC gana por primera vez en Cataluรฑa con 15 escaรฑos, Bildu aumenta 2 escaรฑos y se queda con 4. JxCAT ha perdido un escaรฑo y tiene 7. La presencia del nacionalismo catalรกn y vasco en el congreso es amplia: entre PNV, Bildu, Esquerra y JxCAT suman 32 diputados.
El PSOE se enfrenta a un dilema similar al de la mociรณn de censura pero con una posiciรณn negociadora mucho mรกs fuerte y a una distancia del segundo partido de 57 escaรฑos. Es posible que no necesite a los independentistas, y la vicepresidenta Carmen Calvo ya ha anunciado que intentarรกn gobernar en solitario. Quizรก lo pueda conseguir si se producen abstenciones en la segunda sesiรณn de investidura, en la que solo hace falta una mayorรญa simple.
La posibilidad de un acuerdo entre PSOE y Cs estรก casi descartada. Ambos partidos sumarรญan si decidieran gobernar juntos, pero Ciudadanos ya no estรก interesado en ser el partido liberal de centro de hace unos aรฑos, sino que aspira a convertirse en el lรญder de la derecha. Anoche los simpatizantes del PSOE reunidos en Ferraz le dijeron a Sรกnchez que โcon Rivera noโ y รฉl respondiรณ: โOs he escuchado. Nosotros no vamos a hacer como ellos, no vamos a poner cordones sanitarios. Solo vamos a poner una condiciรณn: respetar la Constituciรณn espaรฑola y la justicia social.โ Rivera, por su parte, no abriรณ ninguna puerta a un posible apoyo al PSOE en su discurso e insistiรณ en su clave de la campaรฑa: echar al seรฑor Sรกnchez.
Los รบnicos verdaderamente preocupados por una posible alianza PSOE- Cs son Unidas Podemos, que llevan semanas avisando de ello. Sin embargo, a pesar de que serรญa un acuerdo menos extraรฑo de lo que sugiere la polarizaciรณn actual, va en contra de la estrategia de Ciudadanos y posiblemente servirรญa para reforzar al PP. Unidas Podemos ha conseguido lo que querรญa y lo que sabรญa que iba a conseguir: influir en el gobierno. Pero ha perdido completamente su relevancia y se ha convertido en un apรฉndice del PSOE.
Todo el escenario de pactos estรก condicionado por los resultados del 26 de mayo. El PSOE ha ganado en casi todas las comunidades autรณnomas y ha conseguido arrebatarle feudos al PP; en Murcia han ganado los socialistas despuรฉs de 26 aรฑos. Da la sensaciรณn de que este dominio del PSOE se trasladarรก a las elecciones locales y autonรณmicas. Y hasta que no estรฉn claros los resultados del 26 de mayo no tendremos un gobierno nacional claro.
Ricardo Dudda (Madrid, 1992) es periodista y miembro de la redacciรณn de Letras Libres. Es autor de 'Mi padre alemรกn' (Libros del Asteroide, 2023).
