ĀæAlguien ha dicho algo sobre IMDINB, el Ćŗltimo libro de Gerardo Deniz? Arriesgo una respuesta: nel. Deniz estĆ” condenado a tener lectores secretos, y esa serĆ” su gloria secreta. Se ha dicho mucho, pero no demasiado, que detrĆ”s de la intimidante capa referencial que lo caracteriza hay un poesĆa narrativa, sabrosa y no pocas veces hilarante. Incluso cachonda. Todo ello es cierto, pero para verificarlo hay que entrarle. No muerde.
Ahora tenemos IMDINB (editado magistralmente por Roberto RĆ©bora y Taller Ditoria, como es costumbre), que no es un libro de poemas sino una novelita o un cuentote. Ćl lo llamarĆa textĆculo. En Ć©l, Deniz le da vuelo a una de sus mĆ”s caras obsesiones, pues el libro trata de Ā”un instituto de seƱoritas calentonas! Son astrĆ³logas, duchas en ommmmms, conocimientos arcanos y viejos tractatus zodiacales. Tienen una pitonisa y gurĆŗ: Clema, que levita y se desdobla a placer. Y les pasan cosas que no voy a contar aquĆ. Baste imaginar a Deniz levantando ese microcosmos de la nada, salivando ante la creaciĆ³n de sus nĆnfulas, sus laboratorios y bibliotecas.
Aunque de inmediato pensamos en el colegio de seƱoritas de Salvador Elizondo, e incluso (por otras razones) en el Instituto Benjamenta, de Robert Walser, lo cierto es que este libro ha abrevado notablemente en las pĆ”ginas del MarquĆ©s de Sade. A ambos marqueses (de Sade y de Almela) les llama poderosamente la atenciĆ³n el proceso de iniciaciĆ³n de sus pĆ”rvulas, y su ulterior derrumbe. A mĆ asĆ me lo parece: Deniz querĆa su Justine y produjo a Clema.
El tiraje del libro es mĆnimo, pero vale la pena buscar, preguntar y hacerse con IMDINB. ĀæQue quĆ© significan esas siglas? Obviamente Instituto Mexicano para el Desarrollo Integral de la NiƱa Bien.
– Julio Trujillo
