Hay algo fascinante en las listas de libros. Los que acaban de salir, los mรกs vendidos, los importantes en la historia de una disciplina, los de lectura obligatoria para un curso, los grandes libros que todos deberรญan leer, los mรกs traducidos, los mรกs influyentes, las bibliografรญas sobre un tema y hasta los catรกlogos editoriales. Hay quienes leen listas, no solo por razones prรกcticas, sino por un placer difรญcil de explicar. Hay quienes las escriben por un placer todavรญa mรกs extraรฑo. Dicen que Xavier Villaurrutia hacรญa listas (que no publicaba, pero a veces enseรฑaba) de los que sรญ y de los que no.
En el siglo IX, Focio (patriarca de Constantinopla, inventor de la reseรฑa de libros y santo de la Iglesia ortodoxa que pudiera ser el santo patrono de los reseรฑadores) escribiรณ cerca de 300, con mucha libertad. Todas empezaban con la palabra “Lee”, porque eran para un hermano suyo que vivรญa en otra parte. Por ejemplo: Lee Los primeros principios de Orรญgenes, aunque el primer tomo es un tejido de fรกbulas, lleno de blasfemias. (Hay una selecciรณn traducida del griego al inglรฉs como Photius, The bibliotheca.)
En el siglo XVIII, Juan Josรฉ de Eguiara y Eguren, indignado por el desprecio de un bibliรณgrafo espaรฑol a los libros escritos en Mรฉxico, compilรณ en latรญn una Bibliotheca mexicana que incluye desde los cรณdices indรญgenas. (El Fondo de Cultura Econรณmica publicรณ sus Prรณlogos a la Biblioteca mexicana.)
Mortimer Adler, autor del utilรญsimo How to read a book, creรณ la colecciรณn Great books of the Western world que vende la Britannica (la lista puede verse en la Wikipedia). Ademรกs, promoviรณ una fundaciรณn que sostiene miles de clubes de lectura de clรกsicos en los Estados Unidos (Great Books Foundation).
Algunos libros, como el Cantar de los cantares o los Diรกlogos de Platรณn, han marcado la vida occidental. Pero hay muchas otras vรญas de influencia. Un poema puede influir mรกs que un libro de poemas. Unos versos cantados, mรกs que escritos. Una pelรญcula mรกs que una novela. Un programa de televisiรณn mรกs que un periรณdico. En el mundo cientรญfico de hoy, la vรญa de influencia normal ya no son los libros, sino los artรญculos publicados en revistas prestigiadas internacionalmente. Esto sucede incluso en la lingรผรญstica, donde las ideas de Jakobson han influido incluso en otras disciplinas, pero no estรกn en un libro emblemรกtico. Los medios masivos y la web han creado nuevas vรญas de influencia que pesan mucho para globalizar una personalidad, una pelรญcula, un deporte, una prenda como los jeans, una marca, una frase, una bebida.
No siempre es fรกcil observar, menos aรบn medir, la influencia. Hay influencias inadvertidas. En una conversaciรณn, las personas que escuchan pueden mimetizar los gestos del que habla, inconscientemente. Entre las influencias vivas, hay recientes y antiguas, sin distinguirlas ni saber cuรกndo, dรณnde y cรณmo se originaron. Segรบn la Wikipedia, la frase A picture is worth a thousand words fue un eslogan publicitario inventado en los Estados Unidos a principios del siglo XX, aunque se ha dicho que es un proverbio chino. Y, a veces, lo que se dice en todas partes se presenta como dicho local (“No hay mal que por bien no venga” –como decimos en Comala).
La influencia literaria puede estar en los temas, en las ideas o en ciertas formas de escribir. Con excepciones, como la difusiรณn occidental del soneto italiano, resulta mรกs obvia la influencia de las ideas. Quizรก por eso, en la encuesta realizada por Agustรญn Yรกรฑez para la revista Occidente de Guadalajara sobre “Los libros fundamentales de nuestra รฉpoca” (1945), predominaron los libros de ideas.
Hay problemas semejantes para responder a la encuesta de Letras Libres sobre “Los libros publicados en las รบltimas dรฉcadas con mayor influencia en el presente”. Nadie ha leรญdo todo en todos los idiomas para observar la influencia global de ciertas formas literarias, ideas y temas. Pero se puede partir de las listas de libros mรกs traducidos, de ver la lista de premiados con el Nobel, de ver en cuรกntos idiomas hay pรกginas de la Wikipedia sobre un autor o libro, de ver cuรกntas son las pรกginas correspondientes en Google.
Es de suponerse que los novelistas premiados con el Nobel ya eran leรญdos en muchos paรญses, y lo fueron mรกs despuรฉs del premio. Pero no cabe suponer lo mismo de los quince o veinte poetas premiados en el รบltimo medio siglo (desde Seferis hasta Transtrรถmer). Algunos eran o se volvieron famosos, pero no necesariamente leรญdos y menos aรบn influyentes en la poesรญa de otros, quizรก con excepciรณn de Neruda y Paz. No ha habido nada semejante en el caso del teatro. La influencia de Soyinka, Fo y Pinter, reconocidos con el Nobel, no se puede comparar con la de Pirandello y O’Neill, Brecht y Sartre, Beckett y Ionesco.
Tambiรฉn es de suponerse que los libros mรกs traducidos son los mรกs influyentes. Pero en el Index translationum de la unesco predominan la Biblia, Lenin, Agatha Christie y otros best sellers. De los publicados en dรฉcadas recientes, destacan El alquimista de Paulo Coelho con 67 traducciones, Harry Potter de J. K. Rowling con otras tantas, las novelas de Stephen King y Murakami, las “investigaciones” de Dan Brown, asรญ como la Breve historia del tiempo de Stephen Hawking, un libro asombrosamente vendido en muchos idiomas, aunque escasamente leรญdo.
De la narrativa menos reciente, fueron de influencia mundial los cuentos de Borges y las novelas Pedro Pรกramo de Rulfo y Cien aรฑos de soledad de Garcรญa Mรกrquez. En el caso del pensamiento, Indian home rule de Gandhi, El ser y el tiempo de Heidegger, Teorรญa general del empleo, el interรฉs y el dinero de Keynes, Camino de servidumbre de Hayek, ¿Quรฉ es la vida? de Schrรถdinger, Humanismo integral de Maritain, el Arte de amar de Fromm, Estructuras sintรกcticas de Chomsky, El opio de los intelectuales de Aron, El pensamiento salvaje de Lรฉvi-Strauss, Las palabras y las cosas de Foucault, La sociedad contra el Estado de Pierre Clastres, La invenciรณn democrรกtica de Lefort, Obra abierta de Eco, Los objetos fractales de Mandelbrot, el marxismo universitario y los libros de superaciรณn personal.
Hay cambios fundamentales de mentalidad que se pueden atribuir a libros de las รบltimas dรฉcadas.
La idea de que la miseria es una desgracia irremediable fue dinamitada. Hasta mediados del siglo XX se creรญa que asรญ son las cosas, y no hay nada que hacer; a menos que las vรญctimas de la opresiรณn se liberen con violencia; a menos que sus redentores, desinteresadamente, los encabecen y dominen en un Estado revolucionario.
Desde esa perspectiva, reconocer que en la vida pobre puede haber sabidurรญa, conocimientos, valores y formas de vivir admirables, se consideraba reaccionario. El atrevimiento intelectual de Gandhi, Lรฉvi-Strauss, Clastres, Illich y otros tuvo que enfrentarse a ese prejuicio. Abrieron paso a las verdaderas soluciones: las del mismo Illich, Schumacher, Yunus, Paul Polak, Bunker Roy y otros.
No menos notable fue acabar con el prestigio milenario de la guerra, la violencia y el Estado. Todavรญa en grandes pensadores como Marx y Freud era insuperable esa tradiciรณn. Afortunadamente, Fromm, Hayek, Popper, Aron, Camus, Paz, Solzhenitsyn, Castoriadis, Lefort, Vargas Llosa y otros la dejaron atrรกs, aunque de ahรญ partieron.
Milton Friedman no fue un pensador del mismo nivel, pero como tรฉcnico ha tenido una influencia mundial sobre el diagnรณstico de la inflaciรณn y la crรญtica del Estado. No confundir con sus ideas simplistas, entronizadas por los “Chicago boys”. ~
(Letras Libres, agosto 2013)
(Monterrey, 1934) es poeta y ensayista.