Supe leer, supongo, todo Mailer. Las novelas fastuosas y los gloriosos reportajes, desde los asesinos hasta los astronautas, y las formidables semblanzas, que mรกs bien son autobiografรญas (apenas disimuladas, como la dedicada a Picasso), o el divertido Of Women And Their Elegance que, mรกs que sobre mujeres y su elegancia era sobre la propia vida del tosco chofer de trรกiler narrativo que era Mailer). Las novelas que escribรญa de prisa para ganar dinero y mantener a sus treinta o cuarenta exmujeres y a sus doscientos hijos podรญan colapsarse (las novelas, mรกs que las mujeres). Pero las grandes novelas (como The Naked and The Dead, la primera que leรญ) y una que me pareciรณ gloriosa, aunque no le fue muy bien, situada en el Egipto de los faraones (onas): Ancient Evenings; o las que mezclaban reportaje con novela, como la felizmente inacabable The Executionerโs Songโฆ ยกCaramba, quรฉ bien me la pasรฉ leyendo a Mailer, con cuรกnta frecuencia y con quรฉ deleite!
Hace unos meses, esa lealtad me llevรณ a leer The Castle In The Forest (cuya cuarta de forros, por cierto, tiene un excelso retrato de Mailer, debido a Cristina Pabst). Es un libro raro, no muy eficiente quizรกs para quienes saben de novelas, cuyo tema inaccesible es la historia de la infame estirpe de Adolf Hitler, los compulsivos incestos de su padre, y el relato de la infancia del posterior tirano. Recuerdo una escena fascinante que describe el desenlace de la espantosa relaciรณn filial entre el padre y Alois, el medio hermano mayor de Hitler. Creo que nunca una lectura me habรญa sumergido en tal estado de terror. Desde el tema โclaro, la โbanalidad del malโโ, culminar la novela era imposible, y mรกs aรบn para un octogenario, aunque se apellidara Mailer y se haya tuteado con Mohamed Ali y con Marilyn Monroeโฆ
Es un escritor, editorialista y acadรฉmico, especialista en poesรญa mexicana moderna.