Cuando el joven Luis de Leรณn (1527-1591), a los catorce aรฑos, entrรณ como estudiante a la Universidad de Salamanca y, unos meses despuรฉs, como novicio a la Orden de San Agustรญn, los renacimientos medievales (de los siglos VIIIa XII) y, sobre todo, el italiano (de los siglos XV y XVI) habรญan desembocado en una renovaciรณn cultural que se volviรณ conflictiva.
La reforma desde adentro tuvo como figura ejemplar a Erasmo (1466-1536), pero fue rebasada por la ruptura de Lutero (1483-1546) con el apoyo de algunos prรญncipes. Hubo enfrentamientos armados; y Carlos V, emperador del Sacro Imperio Romano Germรกnico, negociรณ la Paz de Augsburgo (1555): una soluciรณn con integrismos locales, en vez del integrismo imperial. Los luteranos vivirรญan bajo un prรญncipe luterano y los catรณlicos bajo un prรญncipe catรณlico (cuius regio, eius religio). Todos los principados convivirรญan bajo el Imperio pacรญficamente, pero los sรบbditos de cada prรญncipe no convivirรญan con los de otra religiรณn: o se convertรญan a la fe del prรญncipe o se iban (como todavรญa sucede en algunas comunidades indรญgenas de Mรฉxico). Paralelamente, los lรญderes de la renovaciรณn cristiana quedaron separados en dos bandos opuestos: la Reforma protestante y la Contrarreforma catรณlica. En un tercer bando, anรณnimo ydifuso, estaban los que no querรญan renovaciรณn.
La Contrarreforma fue Contra, pero tambiรฉn Reforma; con la incomodidad y hasta el peligro de compartir posiciones con el bando contrario. Por ejemplo: mucho antes de la separaciรณn, los renovadores creyeron que las lenguas vernรกculas podรญan ser literarias y ocuparse de temas elevados, hasta ponerse a la altura del latรญn. Gonzalode Berceo (c. 1197-1264) hizo literatura religiosa en “romanz paladino [en castellano comรบn y corriente], en el cual suele el pueblo fablar con so vecino” (Vida de Santo Domingo de Silos). Dante (1265-1321) hizo lo mismo en la Divina commedia, aunque escribiรณ en latรญn su teorรญa para justificarlo (De vulgari eloquentia). Otro poeta culto, el Arcipreste de Hita (c. 1284-c. 1351) escribiรณ en espaรฑol su Libro de buen amor, como una especie de Ovidio cristiano. Y Luterocreรณ un clรกsico de la lengua alemana y un bestseller con su traducciรณn del Nuevo Testamento (1522) y de toda la Biblia (1534).
Absurdamente, esto llevรณ a que las traducciones bรญblicas se volvieran sospechosas de luteranismo. En Sevilla, donde hubo muchossimpatizantes de la Reforma, varios fueron quemados por la Inquisiciรณn. Casiodoro de Reina(c. 1520-1594), que estuvo en el monasterio de San Isidoro de Sevilla y tradujo la Biblia, tambiรฉn fue quemado, pero en efigie, porque logrรณ huir a Ginebra, donde descubriรณ que Calvino tambiรฉn quemaba. Huyรณ nuevamente a Londres, y finalmente publicรณ su Biblia del Oso (asรญ llamada por el oso comiendo miel de la portada) en Basilea (1569).
Leer la Biblia se volviรณ cosa de protestantes, poco recomendable a los catรณlicos. Hubo que esperar cuatro siglos para que el Concilio Vaticano II (1962-1965) declarara: “Es conveniente que los cristianos tengan amplio acceso a la Sagrada Escritura” y “que se redacten traducciones aptas y fieles en varias lenguas, sobre todo de los textos primitivos de los sagrados libros”.
Asรญ pensaba el papa Dรกmaso (gallego, 304-384) cuando le encargรณ a Jerรณnimo de Estridรณn (dรกlmata, c. 347-420) una versiรณn completa de la Biblia en latรญn para los que no sabรญan griego ni hebreo en el mundo cristiano occidental. Seis siglos antes, en el mundo judรญo de Alejandrรญa, las escrituras bรญblicas fueron traducidas al griego para los judรญos helenizados que no sabรญan hebreo. El conjunto de estas biblia (libros) o graphai (escrituras) fue llamado la Biblia Septuaginta o de los Setenta o LXX en honor a la leyenda de que Ptolomeo II Filadelfo (308-246) la habรญa encargado a 72 traductores para la Biblioteca de Alejandrรญa.
Tambiรฉn los cristianos orientales que hablaban griego y no sabรญan hebreo usaron la Septuaginta, dela cual se hicieron las primeras traducciones al latรญn. Jerรณnimo las objetรณ porque eran traducciones de traducciones: puso el Antiguo Testamento en latรญn directamente del hebreo (con excepciรณn de los libros tardรญos escritos en griego) y puso el Nuevo Testamento en latรญn del griego (la lengua original, con excepciรณn de algunos textos arameos que se perdieron).
Jerรณnimo fue canonizado como santo y con el tiempo su traducciรณn latina se volviรณ canรณnica. Su Biblia para el vulgo que no sabรญa mรกs que latรญn fue lamรกs divulgada, llamada la Vulgata y entronizada por el Concilio de Trento (1545-1563). La traducciรณn nunca fue declarada infalible, pero muchos sintieron que era intocable. Peor aรบn: ese concilio prohibiรณ la traducciรณn de la Biblia a las nuevas lenguas vulgares, aunque la Septuaginta y la Vulgata fueron precisamente traducciones a las lenguas vulgares.
La renovadora religiosa Santa Teresa de Jesรบs (1515-1582) da un testimonio de la falta que hacรญan las traducciones al espaรฑol en el prรณlogo a sus Conceptos del amor a Dios. Habla del
trabajo que se padece en no tener claridad. Habiรฉndome a mรญ el Seรฑor, de algunos aรฑos acรก, dado un regalo grande cada vez que oigo o leo algunas palabras de los Cantares de Salomรณn, en tanto extremo que, sin entender la claridad del latรญn en romance [en espaรฑol], me recogรญa mรกs y movรญa mi alma que los libros muy devotos que entiendo…
Otra monja, Isabel Osorio, prima de Fray Luis de Leรณn, sintiรณ la misma necesidad y le pidiรณ una traducciรณn. Fray Luis habรญa escrito poemas celebrados (que nunca publicรณ: circularon en copias manuscritas hasta el siglo siguiente, cuando Quevedo los editรณ); y el encargo (perfecto para su talento) lo llevรณ a crear una prosa digna del Cantar de los Cantares, en su traducciรณn y explicaciones.A sabiendas de los riesgos que corrรญa, tomรณ la precauciรณn de pedirle a su prima que le devolviera el manuscritoy lo guardรณ. Pero un novicio que entrรณ a limpiar su celda lo descubriรณ, lo copiรณ y empezรณ a circular (parece que una copia llegรณ hasta Perรบ).
A los cuarenta aรฑos, Fray Luis era un sabio renacentista (lector entusiasta de los clรกsicos, traductor del latรญn, griego y hebreo), un cristiano de espiritualidad ilustrada a la manera de Erasmo, un renovador de la letra y el espรญritu de la vida religiosa, un artista admirable del verso y de la prosa y, sobre todo, un gran poeta. No le faltaban envidiosos. Ademรกs, como Santa Teresa, tuvo antepasados judรญos; y, como Lutero, era agustino. Como si fuera poco, encontrรณ errores en la Vulgata y los seรฑalรณ. Esta “arrogancia” fue denunciada ante la Inquisiciรณn por sus colegas universitarios. Mientras se aclaraban las cosas, pasรณ cinco aรฑos en prisiรณn.
El capรญtulo cuarto del Cantar de los Cantares traducido por San Jerรณnimo comienza: Quam pulchra es, amica mea! Quam pulchra es! Oculi tui columbarum, absque eo quod intrinsecus latet. Literalmente: ¡Quรฉ bella eres, amiga mรญa! ¡Quรฉ bella eres! Tus ojos de paloma absque eo quod intrinsecus latet. Dejo en latรญn la frase problemรกtica. Juan Lรณpez de Salamanca (siglo XV) la explicรณ asรญ: “Sin aquello que se esconde dentro, que es la castidad.” La palabra crรญtica es intrinsecus, que segรบn Raimundo de Miguel (Nuevo diccionario latino-espaรฑol etimolรณgico) puede traducirse como “interiormente” y viene de intra (dentro) y secus (sexo). Comenta Fray Luis (El cantar de los cantares, Colecciรณn Austral):
En la traslaciรณn y exposiciรณn de esto hay alguna diferencia entre los intรฉrpretes. La voz hebrea zama, que quiere decir cabellos o cabellera, es propiamente la parte de los cabellos que cae sobre la frente y ojos, que algunos los suelen traer postizos, y en castellano se llaman lazos. San Jerรณnimo, no sรฉ por quรฉ fin, entendiรณ por esta voz la hermosura encubierta; y asรญ traduce: Tus ojos de paloma, demรกs de lo que estรก encubierto. En lo que no solamente va diferente del comรบn sentido de los mรกs doctos en esta lengua, pero tambiรฉn en alguna manera contradice a sรญ mismo, que en […] Isaรญas [47, 2], donde estรก la misma palabra, entiende por ella torpeza y fealdad, y asรญ la traduce.
En una carta que escribiรณ en prisiรณn para defenderse, fue mรกs explรญcito: “San Jerรณnimo entendiรณ que la palabra zama, que hemos dicho, era el nombre propio con que en aquella lengua se nombran las vergรผenzas de la mujer” y “por no ofender los oรญdos, usรณ de rodeo”. Pero “aquella palabra quiere tambiรฉn decir cabellos, a lo que propiamente llamamos en castellano en las mujeres copetes o aladares”. Fray Luis tradujo en prosa: “Tus ojos de paloma entre tus guedejas.” Y en una versiรณn rimada: “y tus ojos son bellos y graciosos, como de una paloma muy preciada, entre esos tus copetes tan hermosos” (Obras completas castellanas, Biblioteca de Autores Cristianos).
Quizรก la palabra zama tuvo acepciones conexas (cabellera / guedejas o copetes o lazos o lados o aladares o flecos / velo / ocultaciรณn), lo cual explicarรญa las variantes. San Gregorio de Nisa (330-400), contemporรกneo de San Jerรณnimo, dice en su Comentario al Cantar de los Cantares: “Palomas son tus ojos a travรฉs de tu velo” (segรบn el editor en espaรฑol Teodoro H. Martรญn-Lunas), aunque la Septuaginta dice trรญjoma (cabellera). Cipriano de Valera (รmsterdam, 1602): “Tus ojos de paloma entre tus copetes.” La Biblia King James: “Thou hast doves’ eyes within thy locks.” Algo asรญ como: “Tienes ojos de paloma entre tus flecos.”
Jesรบs Dรญaz de Leรณn (1851-1919) tradujo “sin lo que estรก dentro encubierto”; pero en las notas lo interpreta como “debajo de tu velo”. Asombrosamente, este mรฉdico de Aguascalientes publicรณ el Cantar de los Cantares con caracteres hebreos y su propia traducciรณn, discutida palabra por palabra. Paralelamente, para confrontaciรณn, transcribe las versiones de la Septuaginta (con caracteres griegos), de San Jerรณnimo (al latรญn), de Lutero (al alemรกn, con caracteres gรณticos), del rey Jacobo al inglรฉs (King James, 1611) y del pastor suizo Jean Frรฉdรฉric Ostervald (1663-1747, al francรฉs). Pocos han tenido este libro en las manos (oportunidad que debo a Mauricio Beuchot): El Cantar de los Cantares de Salomรณn traducido del hebreo por el doctor Jesรบs Dรญaz de Leรณn, 2ª ediciรณn, Aguascalientes: Imprenta de J. T. Pedroza e Hijos, 1891, 276 pรกginas. Quizรก por eso se ha dicho errรณneamente que armรณ su traducciรณn a partir de las traducciones previas a otras lenguas; o, por el contrario, que las traducciones a otras lenguas que transcribiรณson suyas. Merece una ediciรณn crรญtica, aprovechando el Fondo Jesรบs Dรญaz de Leรณn que guarda el CESU de la UNAM.
Finalmente, el papa Juan Pablo II promulgรณ el 25 de abril de 1979 una revisiรณn de la Vulgata (Nova Vulgata Bibliorum Sacrorum Editio) que corrige el error seรฑalado por Fray Luis y concuerda con Dรญaz de Leรณn. En vez de “oculi tui columbarum, absque eo quod intrinsecus latet”, pone simplemente “oculi tui columbarum per velamen tuum”: tus ojos de paloma entre tu velo. ~
(Monterrey, 1934) es poeta y ensayista.