A lo largo de 35 aรฑos de trayectoria profesional como actor ha formado parte de la Compaรฑรญa Nacional de Teatro, el Centro de Experimentaciรณn Teatral, asรญ como de varios grupos independientes. Ha participado en mรกs de noventa puestas en escena entre las que figuran Mujeres soรฑaron caballos de Daniel Veronese, Noche de epifanรญa y Los justos, ambas dirigidas por Ludwik Margules, La Malinche, dirigida por Johann Kresnik, y El otro exilio de Josรฉ Acosta. En 2002 recibiรณ el Ariel al mejor actor por la cinta Cuento de hadas para dormir cocodrilos.
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¿Cรณmo fue que empezaste a actuar?
De chico fui un pรฉsimo alumno. A tal grado que, a los diecisรฉis aรฑos, mis papรกs, dรกndome como caso perdido, me consiguieron un trabajo en la Comisiรณn Federal de Electricidad. Ahรญ sacaba copias en un Xerox. Un dรญa llegรณ un tipo que, segรบn me enterรฉ despuรฉs, manejaba un grupode teatro deaficionados dentro de la Comisiรณn. Venรญa a sacar copias de un libreto. Ese fue mi primer contacto con el teatro.
¿Y te acuerdas quรฉ obra era?
Sรญ, una pastorela que รฉl habรญa escrito. Y como no debรญa sacar las copias ahรญ porque no era un documento oficial, yo aprovechรฉ ese acto clandestino para hacerle muchas preguntas sobre su grupo. Me invitรณ a un ensayo, fui y me gustรณ. Al poco tiempo ya estaba en una de las obras. Debo decir que por primera vez en mi vida sentรญque estaba en el lugar donde querรญa estar. Fue como una epifanรญa, una revelaciรณn. Me volvรญ un individuo, una persona y no el ente abstracto que andaba deambulando por ahรญ.
¿Y cรณmo fue que entraste al รญnclito Instituto Andrรฉs Soler?
En el grupo de la CFE habรญa un tipo que estudiaba ahรญ. รl me invitรณ a ver la escuela y entrรฉ. Habรญa una instrucciรณn muy formal, muy a la antigua. Sin embargo, ahรญ conocรญ al dramaturgo Antonio Gonzรกlez Caballero, mi primer maestro. Con รฉl comenzรณ el descubrimiento del teatro como un espacio imaginativo, de introspecciรณn, de manejo de energรญas personales. Sus ejercicios daban resultados muy interesantes. En esa รฉpoca vi El juego de los insectos de los hermanos Capek, dirigida por Julio Castillo. Estaban el Flaco Ibรกรฑez, Ofelia Medina, Blanca Guerra, Salvador Garcini. Esa obra me transformรณ: cambiรณ radicalmente mi forma de ver el teatro.
Tal vez Julio Castillo sea el director del teatro universitario de ese tiempo que mejor se conectรณ con el pรบblico.
Aunque el menos teรณrico de su generaciรณn, poseรญa una intuiciรณn y una inventiva teatral formidables. Lograba narrar un mundo muy personal a travรฉs de los textos que escogรญa. Ademรกs de su gran capacidad para manejar el lenguaje teatral, dominaba muy bien una serie de personajes arquetรญpicos de la psique mexicana, quelograba volver universales. Habรญa una gran complicidad con los actores y con el pรบblico. Es un lugar comรบn decirlo, pero era genial.
¿Cรณmo fue que entraste a la Compaรฑรญa Nacional de Teatro (CNT)?
Luis Gimeno daba clases en la Andrรฉs Soler. Cuando se fundรณ la CNT en 1977 nos invitaron a un grupo de actores jรณvenes a formar parte del elenco estable. Fue una gran experiencia porque pude trabajar con actores que admiraba mucho como Augusto Benedico, Carlos Ancira, Miguel Cรณrcega, Mรณnica Serna, Mercedes Pascual. Con ellos aprendรญ a hacer teatro. Hice La verdad sospechosa de Ruiz de Alarcรณn, Luces de bohemia de Valle-Inclรกn, Quรฉ formidable burdel de Ionesco, dirigida por Julio Castillo, Opereta de Witold Gombrowicz. Fue un gran ejercicio de formaciรณn de pรบblicos.
¿Cรณmo ves la CNT de hoy?
El elenco me parece muy sรณlido. Es una compaรฑรญa mucho mรกs heterogรฉnea que la de aquel entonces. Sin embargo, no entiendo bien el esquema de presentaciรณn de las obras. Pienso que amerita una revisiรณn porque no veo que logre un cometido de Compaรฑรญa Nacional. No trasciende fuera de la comunidad teatral.
Regresemos a Julio Castillo.
Con รฉl, los actores trabajaban de una manera muy comprometida. Su teatro hablaba de la realidad, decรญa cosas que eran importantes para uno como espectador en ese momento. Hice tres obras con รฉl. La รบltima fue De pelรญcula, producida en el Centro de Experimentaciรณn Teatral.
¿Ahรญ trabajaste con Georges Lavaudant?
Sรญ, vino a dirigir El balcรณn de Jean Genet. Fue una colaboraciรณn interesante porque su visiรณn de Genet, desde la tradiciรณn francesa, se enfrentaba a la realidad mexicana.
¿Cรณmo haces para trabajar con tantos directores? ¿Tienes una metodologรญa o tratas de adaptarte a cada proyecto?
Los directores con los que me gustatrabajar son los que tienen una visiรณn particular del mundo que con frecuencia va mรกs allรก del texto dramรกtico. No son coreรณgrafos de la escena, proponen algo. Tienen una visiรณn personal.
De tu trabajo, me llaman la atenciรณn varios momentos performรกticos que van mรกs allรก de la literatura. Estoy pensando, por ejemplo, en ese momento brutal de La Malinche de Johann Kresnik cuando te masturbabas con un pastel de merengue, o esa escena de la violaciรณn con Ari Brickman en Devastados de Sarah Kane, en varias escenas El otro exilio de Josรฉ Acosta.
Es algo que caracteriza el teatro contemporรกneo. Ya no es solamente la literatura, sino tambiรฉn la expresiรณn del cuerpo en el espacio. El cuerpo tiene su propio lenguaje poรฉtico, que construye imรกgenes muy poderosas. Hay una gramรกtica del cuerpo, una forma de escribir con รฉl.
Me da la impresiรณn de que muchos actores de tu generaciรณn estรกn peleados con eso. Recuerdo que en La Malinche un grupo de actrices cรฉlebres fue a ver la obra y les pareciรณ indignante lo que ocurrรญa en escena, como si el director hubiera maltratado a los actores.
Hay gente que tiene una visiรณn muy limitada, no solo del teatro sino del arte en general. Aunque se construye a partir de parรกmetros especรญficos, el arte es ilimitado. Supongo que es paradรณjico hacer algo concreto, que no tenga limitaciones, pero asรญ es. Y si uno como actor se autolimita (fรญsica o mentalmente), trabaja en contra de uno mismo y de ese modo no hay posibilidad de desarrollarse como artista.
¿Podrรญas hablar del procesode La Malinche?
Kresnik es un tipo enloquecido, furibundo, anarquista, que quiere conmover desde la plataforma del teatro. Confronta al pรบblico en un plano social y polรญtico. Le interesa mucho provocar a una clase polรญtica intelectual. Dirige como un pintor mรกsque como un director de teatro. Dibuja con los actores. En La Malinche รฉramos como sus colores, sus brochas. Nos pegaba en el lienzo segรบn le convenรญa. Era muy divertido. Lo recuerdo como un gymboree de adultos.
Fue un gran รฉxito de pรบblico que incomodรณ al entonces gobernador de Guanajuato, Vicente Fox, quien estuvo tentado a prohibir la obra.Y en el Jimรฉnez Rueda molestรณ a funcionarios del INBA y Conaculta. En ese sentido, Kresnik logrรณsu objetivo.
La obra era muy fuerte. En esa escena que mencionas del pastel yo representaba a Hernรกn Cortรฉs cargando una pirรกmide (que era el pastel). Eventualmente, me masturbaba con รฉl. En el estreno en Guanajuato, logrรฉ que casi cien personas se salieran del teatro.
A mรญ me pareciรณ un trabajo formidable por el compromiso de los actores hacia una propuesta escรฉnica. Y siento que eso le hace falta al teatro mexicano: actores que se asuman parte de una bรบsqueda estรฉtica y no empleados de un director o de un productor. Seguimos muy permeados por una lรณgica sumamente paternalista.
El actor es un creador o, por lo menos, deberรญa serlo. Es una idea que viene desde Grotowski, o incluso desde Artaud, quizรก, porque รฉl pensaba que el actor no era un mero representador sino un catalizador.
¿Cรณmo ves el panorama general del teatro en Mรฉxico?
Acabo de estar en Nueva York. Vi varias cosas desde lo comercial hasta lo alternativo. Y veo que aquรญ en Mรฉxico tenemos un abanico mรกs amplio de propuestas. Al mismo tiempo, es tan vasto el panorama que hay una atomizaciรณn entrelos que hacemos teatro… Necesitamos mรกs vasos comunicantes. ~
(ciudad de Mรฉxico, 1969) es dramaturgo y director de teatro. Recientemente dirigiรณ El filรณsofo declara de Juan Villoro, y Don Giovanni o el disoluto absuelto de Josรฉ Saramago.