Qué bueno que por fin alguien sin miedo hable sobre la triste realidad de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México, donde un grupo de hombres apoyados por un director mediocre, buscando intereses propios, mezclan la política con el arte. Lo peor de todo es que el mismo grupo se atreve a culpar a la secretaria de Cultura, Sra. Elena Cepeda, por todo, incluyendo el bajíssssimo (el más bajo en sus treinta años) nivel artístico de la orquesta. Probablemente ella es la primera funcionaria de la Secretaría de Cultura en los últimos años que decidió poner fin a la mediocridad, xenofobia y agresión dentro de la propia institución. También faltó mencionar que hace poco tiempo “perdimos” otro músico de gran talla –según yo y muchos–: la mejor violinista en México, Erika Dobosiewicz, que ganó el puesto de concertino en la Orquesta Sinfónica Nacional y dejó de formar parte de “la grilla”. Felicidades señor Sheridan. ~
Ética para el navegador
Las interacciones en redes sociales nos muestran que la distinción entre lo bueno y lo malo no se fundamenta exclusivamente en la deliberación racional, y que los juicios morales no son…
Raúl Oliván, poligrafista
Raúl Oliván es un ex policía de la extinta Dirección Federal de Seguridad que desde 1997 dirige Poligrafistas de México. La prueba en la que se especializa su empresa mide cambios fisiológicos…
Desarraigado viajero del siglo
Javier Pradera falleció un 21 de noviembre de 2011, hace ahora justo diez años. Apenas dos días antes, en vísperas de la prevista y abultada victoria del pp en las elecciones…
J.G. Ballard (1930-2009): el telescopio invertido
En 1949, mientras los escritores de ciencia ficción desvían la mirada de un planeta surcado por las cicatrices de la guerra y la alzan al espacio exterior en pos de…
RELACIONADAS
NOTAS AL PIE
AUTORES