Dra. Beatriz Urías:
Me pareció sumamente interesante su reciente ensayo (Letras Libres, mayo 2007) del “Hombre Nuevo” de las posrevoluciones y de los Estados totalitarios. Particularmente me atrajo su inteligente punto de vista sobre la novela Eugenia, de Eduardo Urzaiz, situada por usted –muy correctamente– en ese contexto de las utopías expresadas en la ingeniería social y en las técnicas medicoeugenésicas. Y subraya usted que Eugenia es una de las primeras manifestaciones de la eugenesia en el campo de la literatura mexicana.
Al respecto, me complace comunicarle que hace un par de años me encargó la unam escribir una “Introducción” a dicha novela, cuya sexta edición (en general y primera de la unam, colección “Relato Licenciado Vidriera”) proyectaba realizar. El volumen apareció a finales del año pasado, y desde marzo figura en las librerías universitarias.
En dicha presentación procuro explicar las ideas de Urzaiz inscritas en sus diversas profesiones, así como su circunstancia social motivadora, y también señalar su anticipación, en trece años, respecto de algunos conceptos críticos (propios de la distopía) que expresó Aldous Huxley en su novela de 1932 Un mundo feliz.
Por cierto, hace seis meses se publicó en la sección cultural de la revista Proceso (nº 1,571, 10-xii-2006) una nota sobre dicho libro y sobre su “Introducción”, en relación con la entonces reciente película estadounidense Los niños del hombre de Alfonso Cuarón. ~
Atentamente,
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Carlos Peniche Ponce
