El guionista de Kids y director de Gummo y Julien Donkey-Boy ha madurado enormidades. Sin dejar a un lado su universo de freaks e inadaptados, logra con su más reciente trabajo un filme sumamente hermoso, cargado de momentos de genuino lirismo. A través de la historia de un puñado de artistas que viven en una isla preparando “el espectáculo más grande de la tierra” (entre ellos, copias de Marilyn Monroe y Charles Chaplin), presenta una fábula sobre la derrota de las ilusiones y el costo de evadir la realidad y la propia personalidad. Harmony Korine cambió la sordidez por el romanticismo, y el cine salió ganando. Diego Luna interpreta a un imitador de Michael Jackson en la que quizá sea la actuación más lograda de su carrera. Una de las mejores cintas independientes del año pasado. ~
Su libro mรกs reciente es el volumen de relatos de terror Mar Negro (Almadรญa).