ยฟQuรฉ es asinqueto? Leรญ esta palabra en Los viajes de Gulliver, cuyo autor, Jonathan Swift, era un entendido en literatura clรกsica. Me llamรณ la atenciรณn, la busquรฉ y la hallรฉ en un libro de Juan Gil, que no me canso de releer, La India y el Catay. Textos de la Antigรผedad clรกsica y del Medievo occidental (Alianza Editorial, 1995). Pero el concepto figura en la interminable inventiva que acompaรฑa las biografรญas de Alejandro de Macedonia.
Entre las andanzas de Alejandro no podรญa faltar un viaje a las tinieblas, es decir, el mundo de los muertos, que realizรณ montado en una yegua (no deja de llamar la atenciรณn que pueda entrarse al mundo de los muertos a caballo), cuyos potrillos habรญa dejado justo en el lรญmite de la luz, a fin de poder volver de la negrura perpetua, guiado por la yegua que se dirige a sus potrillos, estratagema de la que, segรบn Marco Polo, se valรญan tambiรฉn los mongoles para entrar en la zona de la Oscuridad, desafiando los peligros de la prolongada noche boreal (los meses de invierno).
Alejandro llegรณ en su conquista triunfante a la tierra de unas gentes inmundas que โcomรญan perros, ratones, serpientes, fetos y abortos, asรญ como muertosโ. El Macedonio sintiรณ escalofrรญos ante la maldad inaudita de aquellos pueblos, que eran abominaciรณn de la humanidad (ยฟno es exagerada esta condena de la dieta omnรญvora?) y resolviรณ arrojar los pueblos a un desfiladero y luego sellar el desfiladero de la maldad glotona. Para aislarlo levantรณ una gran puerta y para asegurar la puerta la untรณ con asinqueto (ya apareciรณ la palabrita). Porque es tal la naturaleza del asinqueto que no lo derrite el fuego ni lo mella el acero.
Las virtudes de este singular barniz suscitan preguntas, por ejemplo, ยฟcรณmo transita la sustancia de suave, mรกs o menos lรญquido barniz, a ser tan dura como para que no la melle el acero? Id est, ยฟcรณmo cuajaba? Sabrรก Dios, en aquellos tiempos nadie se hacรญa estas preguntas.
ยฟQuรฉ podemos decir de esta entusiasta disposiciรณn a creer? La literatura clรกsica da abundantes muestras de idealizaciรณn. Es decir que no presenta la realidad como es, sino como debe ser. Un ejemplo: los personajes de Homero son inmaculados, sin falta alguna. Estรกn fijos no cambian, no crecen. Ulises tiene la misma edad a lo largo de los veinte aรฑos de viaje.
Ademรกs notemos que ni en la Ilรญada ni en la Odisea hay un solo villano. Uno de esos villanos frรญos e inclementes, un Yago, por ejemplo. Tampoco en Cervantes figuran villanos. ยฟPor quรฉ? Porque es literatura que, como venimos diciendo, idealiza. Los personajes son como el asinqueto, una idea.
Mi maestro Josรฉ Gaos se preguntaba: ยฟPor quรฉ si se han formulado tantas pruebas de la existencia de Dios, no se ha intentado ninguna prueba de la existencia del diablo? Y se respondรญa: Porque la existencia del diablo, en este mundo, es evidente por ella misma y no necesita prueba alguna.
Ahora, no faltan elementos realistas sazonando la literatura clรกsica y con notable punterรญa. Por ejemplo: la descripciรณn minuciosa โcon precisiรณn, se puede decir, quirรบrgicaโ de las heridas de guerra en la Ilรญada. Tambiรฉn hay apariciones realistas y muy crรญticas en el teatro de Eurรญpides.
Asienta F. L. Lucas en su notable libro sobre Eurรญpides: โConvierte al legendario Agamenรณn, rey de hombres, en un veleidoso, bien intencionado seรฑor aspirante a polรญtico; a Helena, nacida de Zeus, en una superficial, coqueta y vanidosa; al hรฉroe de la Odisea en un cรญnico Maquiavelo.โ
Sรณfocles acusรณ a Eurรญpides diciendo que โhombres y mujeres, hรฉroes y esclavosโ son presentados โcomo ellos sonโ. ยฟQuรฉ clase de censura es esta?
Es decir, como son, no idealizados. Como son: confusos, ambiguos, veleidosos, hipรณcritas. Se puede pensar que a Sรณfocles le parecรญa que estas penosas caracterรญsticas se trasmitรญan a la obra manchรกndola de confusiรณn, ambigรผedad, veleidad, hipocresรญa.
El supremo temple del teatro de Sรณfocles, que la tradiciรณn va juzgar insuperable, se aprecia de rebote, bajo una luz extraรฑa, en esta crรญtica del maestro.
El arte de Sรณfocles es como el templo griego, una idea: cuatro lados iguales bajo la proporciรณn de oro del techo. Edipo, en la tragedia de Sรณfocles, es tambiรฉn una idea.
Edipo es un personaje-asinqueto. ~
(Ciudad de Mรฉxico, 1942) es un escritor, articulista, dramaturgo y acadรฉmico, autor de algunas de las pรกginas mรกs luminosas de la literatura mexicana.