El descontento de Rusia

El nacionalismo ruso tiene una larga y conflictiva historia, que va desde el llamado de Lenin por la unidad soviรฉtica hasta el secesionismo de Yeltsin. Como demuestra la guerra con Ucrania, la relaciรณn de Rusia con sus โ€œhermanas menoresโ€ sigue sin resolverse.
Aร‘ADIR A FAVORITOS
ClosePlease loginn

El 19 de noviembre de 1990, Borรญs Yeltsin dio un discurso en Kiev para anunciar que, despuรฉs de mรกs de trescientos aรฑos de domino de los zares y luego del rรฉgimen totalitario soviรฉtico desde Moscรบ, Ucrania por fin serรญa libre. Rusia, dijo, no querรญa tener ningรบn papel especial en dictar el futuro de Ucrania, ni buscaba convertirse en el centro de ningรบn imperio futuro. Cinco meses antes, en junio de 1990, inspirado por los movimientos independentistas en el Bรกltico y en el Cรกucaso, Yeltsin emitiรณ una declaraciรณn de soberanรญa rusa que sirviรณ como modelo para las demรกs repรบblicas soviรฉticas, incluyendo Ucrania. Aunque no llegaron al extremo de exigir una separaciรณn total, en sus pronunciamientos aseguraban que la URSS tendrรญa รบnicamente el poder que sus repรบblicas estuvieran dispuestas a otorgar.

Las ambiciones imperiales rusas pueden parecer antiguas y persistentes. Incluso medios relativamente sofisticados presentan a un Kremlin empeรฑado en dominar a sus vecinos que parece haber pasado de los zares a Stalin, y de Stalin a Putin. Asรญ que vale la pena recordar que, no hace mucho, Rusia le dio la espalda al imperio. De hecho, en 1990 y 1991 fue el secesionismo ruso โ€“junto con los movimientos separatistas al interior de las repรบblicasโ€“ lo que derrumbรณ a la URSS. Para vencer el intento del lรญder soviรฉtico Mijaรญl Gorbachov de preservar la uniรณn, Yeltsin fusionรณ las preocupaciones de los demรณcratas liberales y los nacionalistas conservadores rusos en una alianza improbable. Como el Make America great again de Trump, o el Brexit de Boris Johnson, Yeltsin insistiรณ en que los rusos, el grupo dominante en la Uniรณn Soviรฉtica, eran un grupo oprimido. Pugnรณ por la separaciรณn de los otros que eran vistos como una carga para permitir la renovaciรณn rusa.

Las raรญces del descontento nacionalista se hallan en el estatus particular que tenรญa Rusia dentro de la Uniรณn Soviรฉtica. Una vez que los bolcheviques tomaron el control de la mayor parte del territorio que habรญa sido imperio de los zares, Lenin declarรณ โ€œla guerra a muerte contra el chovinismo de la Gran Rusiaโ€, y propuso alzar a las โ€œnaciones oprimidasโ€ de las periferias. Para combatir la inequidad imperial, Lenin llamรณ a la unidad, creรณ una federaciรณn de repรบblicas divididas por nacionalidad. Las repรบblicas entregaron su soberanรญa polรญtica a cambio de integridad territorial e instituciones educativas y culturales en sus propias lenguas, y la elevaciรณn de la nacionalidad โ€œtitularโ€ local a puestos de poder. La polรญtica soviรฉtica, siguiendo a Lenin, concebรญa a las repรบblicas como patrias para sus respectivas nacionalidades (con regiones y distritos autรณnomos para las nacionalidades menos numerosas alojadas dentro de ellas). La excepciรณn fue la Repรบblica Socialista Federativa Soviรฉtica de Rusia, abreviada como rsfsr, que continuรณ siendo un territorio administrativo que no estaba asociado con ninguna โ€œRusiaโ€ histรณrica ni รฉtnica.

Rusia fue la รบnica de las repรบblicas soviรฉticas que no tuvo su propio Partido Comunista, su propia capital ni su propia academia de ciencias. Estas omisiones contribuyeron al traslape incรณmodo entre โ€œrusoโ€ y โ€œsoviรฉticoโ€.

Fue Iรณsif Stalin, un georgiano, quien promoviรณ a los rusos al sitio de โ€œprimeros entre igualesโ€ en la Uniรณn Soviรฉtica, confirmado por su brindis de posguerra que daba crรฉdito, โ€œsobre todo, al pueblo rusoโ€ de la victoria de los soviรฉticos sobre la Alemania nazi. Nikita Jrushchov continuรณ el compromiso soviรฉtico con la formaciรณn de una comunidad multiรฉtnica que eventualmente convergiera en un sistema econรณmico, cultural y lingรผรญstico compartido. En este crisol soviรฉtico, Rusia era una especie de hermano mayor, en especial para las naciones supuestamente menos avanzadas de Asia Central. El ruso continuรณ siendo el idioma soviรฉtico de la movilidad ascendente; la historia y la cultura rusa eran las mรกs celebradas, y los rusos en general consideraban que la Uniรณn Soviรฉtica era โ€œsuyaโ€. Al igual que los estadounidenses blancos que etiquetaban a otros grupos como โ€œรฉtnicosโ€, los rusos se veรญan a sรญ mismos como la norma en relaciรณn con las โ€œminorรญas nacionalesโ€.

Para el final de la dรฉcada de los sesenta, la Uniรณn Soviรฉtica estaba conformada por una sociedad en su mayorรญa urbana y educada cuya legitimidad descansaba en su estatus como un Estado de bienestar estable. Liberados del terror, la guerra y las movilizaciones masivas de las dรฉcadas anteriores, los ciudadanos soviรฉticos pasaban su tiempo libre mirando la televisiรณn y escuchando discos (algunos prohibidos por el gobierno, pero fรกcilmente asequibles gracias a las tecnologรญas de consumo producidas por el Estado). Despuรฉs de los horrores de la Segunda Guerra Mundial, en la que entre veinte y veintiocho millones de ciudadanos soviรฉticos murieron, la estabilidad ganada en las dรฉcadas de posguerra llevรณ a que algunas personas se preguntaran cรณmo serรญa llevar una vida significativa una vez concluida la era de constantes luchas. La pregunta resultaba particularmente apremiante para la generaciรณn que se hizo adulta despuรฉs de la muerte de Stalin en 1953. Ellos heredaron los logros mรกs altos del Estado soviรฉtico โ€“la victoria sobre Hitler, la conquista del espacioโ€“, pero carecรญan de una causa histรณrica unificadora. Como sus pares en otras sociedades altamente desarrolladas de la dรฉcada de los setenta, buscaron respuestas en los esfuerzos en pos de la mejora personal, en el despertar espiritual, en el hedonismo sin rumbo y en el activismo ambientalista. Algunos ciudadanos soviรฉticos idealizaban al Occidente inaccesible. Mientras que otros buscaban sus โ€œraรญcesโ€ en distintos pasados nacionales. El Imperio soviรฉtico subsidiรณ distintas identidades etnoculturales subordinadas a una que era comunista (rusa) y universalizante. Con el paso del tiempo esta รบltima se fue vaciando, y las otras estaban listas para ocupar ese espacio.

Los escritores del movimiento denominado โ€œprosa de la aldeaโ€ expresaron el sentir de varias nacionalidades de la pรฉrdida del patrimonio. Estos autores, nacidos en zonas rurales y que estudiaron en Moscรบ, enmarcaban a los pobladores de los pueblos como los autรฉnticos depositarios de la tradiciรณn, en un tono elegiaco equivalente al de contemporรกneos extranjeros como Wendell Berry en Estados Unidos o John McGahern en Irlanda. Los mรกs catastrofistas temรญan que la tierra y el pueblo ruso estuvieran bajo asedio de fuerzas mรกs allรก de su control. La novela apocalรญptica El adiรณs a Matiora (1976), de Valentรญn Rasputin, se inspirรณ en la inundaciรณn de su pueblo natal para crear la estaciรณn hidroelรฉctrica de Bratsk. En la novela, la vieja viuda Darya condena el proyecto como una catรกstrofe ecolรณgica y espiritual. Lamenta la destrucciรณn de su hogar ancestral, pero, en lugar de reubicarse en la ciudad, ella y varios mรกs se quedan en el pueblo y mueren ahogados.

El movimiento de la โ€œprosa de la aldeaโ€ no estaba solo en percibir que la identidad rusa se hallaba bajo amenaza en la Uniรณn Soviรฉtica. Su preocupaciรณn era compartida por los apparรกtchiki rusos como Dmitri Polianski, un integrante del politburรณ, y otros miembros de la intelectualidad como el editor de la revista Octubre, Vsรฉvolod Kรณchetov. Para ellos, la Uniรณn Soviรฉtica era la reencarnaciรณn del Imperio ruso, destinado a retomar su manto histรณrico como una autocracia anti-Occidental arraigada en un campesinado revitalizado. Supuestamente estaba siendo entorpecido por los judรญos (y, cada vez mรกs, por personas del Cรกucaso y de Asia Central), que vivรญan del trabajo y de los recursos rusos, e impedรญan su progreso. A partir de la dรฉcada de los sesenta, el partido de Estado soviรฉtico se apropiรณ de los sentimientos nacionalistas rusos para robustecer su legitimidad en declive. Instituciones oficiales como la editorial Molodaya Gvardiya y la Sociedad Rusa para la Protecciรณn de la Cultura y los Monumentos operaron como centros clave para el reclutamiento de personas a la causa nacionalista rusa.

Gran parte de la cultura que los nacionalistas rusos produjeron era compatible con la imagen que la Uniรณn Soviรฉtica tenรญa de sรญ misma. El pintor Iliรก Glazunov glorificaba a figuras como Ivรกn el Terrible y a san Sergio de Rรกdonezh junto a retratos de Leonid Brรฉzhnev, el secretario general del Partido Comunista. El crรญtico eslavรณfilo Vadim Kozhinov declarรณ que Rusia habรญa salvado al mundo tres veces: de Gengis Kan, de Napoleรณn y de Hitler. Es importante considerar que el elogio a los logros rusos algunas veces iba acompaรฑado de la indignaciรณn acerca de los malos tratos recibidos, y otros materiales mรกs radicales circulaban a manera de samizdat (una forma de autopublicaciรณn). A Aleksandr Solzhenitsyn, que consideraba al comunismo como una ideologรญa extranjera que separaba a Rusia de su herencia ortodoxa, le fue retirada su ciudadanรญa soviรฉtica despuรฉs de una despiadada campaรฑa de prensa que lo acusรณ de โ€œestar desbordado de odio patolรณgicoโ€ por el paรญs y por su gente.

Mientras que los nacionalistas rusos como Solzhenitsyn fueron castigados por desafiar directamente el derecho de gobernar soviรฉtico, los lรญderes soviรฉticos eran castigados por desafiar al nacionalismo ruso. En 1972, Aleksandr Yรกkovlev, el jefe en turno del Departamento de Propaganda del Comitรฉ Central y mรกs adelante uno de los principales asesores de Gorbachov, publicรณ una carta en un periรณdico soviรฉtico en la que atacaba tanto a las formas disidentes como a las que seguรญan la lรญnea oficial del nacionalismo ruso. Este artรญculo llevรณ a la remociรณn de Yรกkovlev y su transferencia a la embajada en Ottawa.

La imagen mรกs popular y la mรกs ampliamente reconocida de la victimizaciรณn rusa fue creada por el escritor, director y actor Vasili Shukshรญn. Shukshรญn naciรณ en la regiรณn Altรกi de Siberia, hijo de un padre campesino que fue ejecutado durante la colectivizaciรณn forzada de la agricultura ordenada por Stalin (un hecho que se excluyรณ de su biografรญa oficial por considerarse impropio de un miembro del Partido Comunista). Despuรฉs de mudarse a Moscรบ, se hizo famoso por los relatos jocosos en los que campesinos excรฉntricos se resistรญan a adaptarse a la vida moderna tocando la balalaica o yendo a los baรฑos de vapor. Para principios de la dรฉcada de los setenta, sin embargo, sus personajes cada vez estaban mรกs perdidos y marginalizados. El รบltimo empeรฑo de Shukshรญn como director de cine y su รฉxito mรกs grande, Kalina krasnaya (1974) โ€“distribuida como El รกrbol rojoโ€“, se centra en Yegor, un exconvicto que lucha por encontrar su sitio despuรฉs de escapar del hambre en el campo cuando era joven. โ€œNo sรฉ quรฉ hacer con esta vidaโ€, le dice Yegor a su amable corresponsal epistolar que termina recibiรฉndolo en su casa despuรฉs de que sale de la cรกrcel. Yegor finalmente reconecta con sus raรญces rurales y comienza una nueva vida como conductor de tractor, pero su redenciรณn es interrumpida cuando los miembros de su antigua pandilla aparecen y lo matan ahรญ mismo en un campo. โ€œNo sientan pena por รฉlโ€, dice frรญamente el asesino mientras fuma un cigarro. โ€œร‰l nunca fue una persona; fue un mujik [un campesino]. Y hay muchos de esos en Rusia.โ€

La alegorรญa de Shukshรญn sobre la emasculaciรณn y la pรฉrdida de las raรญces era un reflejo de su perspectiva cada vez mรกs sombrรญa: en conversaciones privadas, se lamentaba por el estado de pobreza y abandono del campo ruso, y mencionaba que sus parientes hombres eran alcohรณlicos o estaban encarcelados. โ€œHay problemas en Rusโ€™, grandes problemasโ€, escribiรณ en su cuaderno. โ€œLo siento en mi corazรณn.โ€ Pero su trabajo era irรณnicamente sentimental, no era ni iracundo ni acusatorio, y su salida del campesinado y su entrada a la intelectualidad sirviรณ como modelo para los mitos oficiales sobre el ascenso social. Shukshรญn ganรณ los principales premios y se beneficiรณ del amplio apoyo del Estado.

Sin embargo, cuando Shukshรญn muriรณ de un ataque al corazรณn poco despuรฉs del debut de Kalina krasnaya, algunos nacionalistas susurraron que, como su famoso hรฉroe, habรญa sido vรญctima de la depredaciรณn. El escritor Vasili Belov, miembro del grupo de la prosa de la aldea y amigo cercano, escribiรณ en su diario que โ€œsi [los judรญos] no lo envenenaron [a Shukshรญn] directamente, entonces sin duda lo envenenaron indirectamente. Su vida entera estuvo envenenada por judรญosโ€. Su director de fotografรญa, Anatoli Zabolotski, asegurรณ en el borrador de sus memorias (escritas a principios de la dรฉcada de los ochenta) que Shukshรญn habรญa leรญdo Los protocolos de los sabios de Sion antes de su muerte y que quedรณ en shock despuรฉs de enterarse de que los rusos estaban siendo vรญctimas de un โ€œgenocidioโ€. Zabolotski sugiriรณ que el actor que interpretรณ al asesino de Yegor y su esposa (judรญa) habรญan matado a Shukshรญn para proteger el secreto.

Hasta finales de la dรฉcada de los ochenta, la xenofobia paranoica de los nacionalistas rusos (que incluรญa afiches en contra de la mรบsica disco y de los aerรณbics) era algo medio oculto e irrelevante para la mayorรญa. Durante la perestroika (reforma) y la glรกsnost (transparencia) de Gorbachov, sin embargo โ€“cuando todo, desde el Archipiรฉlago Gulag de Solzhenitsyn (1973) hasta la astrologรญa, estaba permitidoโ€“, las preocupaciones de los intelectuales nacionalistas hallaron vรญas mรกs libres y amplias de expresiรณn en la vida polรญtica, donde ademรกs se sumaron a las insatisfacciones mรกs generales. Mientras que los activistas en el Cรกucaso y en el Bรกltico exigรญan mรกs autonomรญa polรญtica y cultural, en abril de 1989 las tropas soviรฉticas aplastaban una gran manifestaciรณn en Tiflis. Las denuncias de esta represiรณn dieron inicio a las sesiones televisadas del Primer Congreso de los Diputados del Pueblo de la URSS en mayo de 1989. Valentรญn Rasputin estaba entre los delegados. Despuรฉs de escuchar a los diputados del Bรกltico y de Georgia quejarse acerca del imperialismo ruso, Rasputin tomรณ la palabra para sugerir amargamente:

ยฟQuizรกs es Rusia quien deberรญa separarse de la Uniรณn, ya que la acusan de todos sus infortunios y ya que su atraso y su torpeza obstruye las aspiraciones progresistas de ustedes? […] Entonces podrรญamos pronunciar la palabra โ€œrusoโ€ sin temor a ser reprendidos por nacionalistas, podrรญamos hablar entonces abiertamente acerca de nuestra identidad nacional. […] Crรฉanme, estamos cansados de ser chivos expiatorios, de ser motivo de burlas, de que nos escupan encima.

Influido por las exigencias de otras repรบblicas, el resentimiento de larga data de los nacionalistas rusos se estaba transformando de manera acelerada en separatismo.

La devoluciรณn polรญtica y econรณmica de la URSS por parte de Gorbachov produjo caos, incluida una severa escasez de alimento. Los medios, de sรบbito sin censura, exponรญan la violencia y la degradaciรณn que iba desde las represiones estalinistas hasta la fallida guerra en Afganistรกn. En respuesta a la andanada de malas noticias, la intelectualidad lamentaba la โ€œruina totalโ€ de Rusia. El historiador cultural y sobreviviente del gulag Dmitri Likhachov dijo que el rรฉgimen comunista habรญa โ€œhumillado y robado tanto a Rusia, que los rusos apenas podรญan respirarโ€. En Collapse. The fall of the Soviet Union (2021), Vladislav Zubok relata cรณmo la idea separatista fue adquiriendo empuje durante la primera mitad de 1990 gracias a tres fuerzas โ€œmutuamente hostilesโ€: los nacionalistas rusos dentro del partido y de las รฉlites, la oposiciรณn democrรกtica que dominaba la polรญtica en Moscรบ y las masas que apoyaban al rival de Gorbachov, Yeltsin, un apparรกtchik carismรกtico que se transformรณ en el โ€œzar del puebloโ€.

Yeltsin, que fue elegido como el primer jefe del Sรณviet Supremo de la rsfsr, azuzรณ a las masas al declarar que la Uniรณn Soviรฉtica les robaba dinero a los rusos para subsidiar a Asia Central. โ€œยกYa fue suficiente con darles de comer a otras repรบblicas!โ€, exclamรณ en un discurso a los obreros, quienes respondieron con un cรกntico en contra de Gorbachov. Yeltsin llamรณ a la โ€œresurrecciรณn espiritual, democrรกtica y nacionalโ€ de Rusia, y prometiรณ redistribuir los recursos entre la gente. Aunque Yeltsin hizo propios algunos elementos de las ideas de los nacionalistas conservadores, รฉl era tambiรฉn pro-Occidental y buscรณ avanzar la democratizaciรณn y la mercantilizaciรณn, a las cuales aquellos se oponรญan.

Contrario a Yeltsin, Gorbachov soรฑaba con crear un โ€œhogar europeo en comรบnโ€ que incluyera a todas las personas de la URSS en una relaciรณn mucho mรกs cercana con Occidente. Para finales de 1990, todas las repรบblicas soviรฉticas respondieron al vacรญo de autoridad central y al ejemplo que pusieron los exsatรฉlites soviรฉticos en Europa del Este al declararse soberanos (y en varios casos, independientes). Sin embargo, la forma futura que tomarรญa su relaciรณn con la uniรณn seguรญa sin estar clara y posiblemente todavรญa era compatible con la visiรณn de Gorbachov de una federaciรณn mรกs equitativa.

En noviembre de 1990, Yeltsin viajรณ a Kiev como parte de una estrategia para debilitar a Gorbachov por medio de una nueva uniรณn desde abajo, basada en los vรญnculos โ€œhorizontalesโ€ entre Rusia, Ucrania, Bielorrusia y Kazajistรกn. Como sucedรญa con otras รฉlites polรญticas de su tiempo, el empleo de la palabra โ€œsoberanรญaโ€ en los discursos y en el material promocional de Yeltsin resultaba ambiguo. De acuerdo con su asesor, Guennadi Bรบrbulis, el ensayo โ€œReconstruir Rusiaโ€ de Solzhenitsyn, publicado poco tiempo antes, ejerciรณ una influencia enorme en Yeltsin. El texto aseguraba que el pueblo ruso estaba exhausto y proponรญa disolver la URSS y al mismo tiempo retener un nรบcleo eslavo de Rusia, Ucrania y Bielorrusia, junto con las zonas pobladas por rusos de Kazajistรกn. La idea de Solzhenitsyn de que estos tres grupos de personas โ€œsurgieron de la preciosa Kievโ€ era una que compartรญan muchos rusos que no necesariamente se identificaban a sรญ mismos como nacionalistas, pero asumรญan que se mantendrรญan unidos.

Las expectativas de Yeltsin de un acercamiento a Ucrania pronto se vieron frustradas. En agosto de 1991, el fallido intento de golpe de los comunistas de lรญnea dura puso punto final a las esperanzas de Gorbachov de revitalizar a la uniรณn y consolidรณ el poder de Yeltsin, para ese momento el primer presidente electo de la rsfsr. El Rada Suprema, el parlamento ucraniano, aprobรณ una ley que proclamaba a Ucrania como un Estado independiente con un territorio โ€œindivisible e inviolableโ€. Yeltsin, aterrado ante la posibilidad de perder Crimea, le pidiรณ a su jefe de prensa que anunciara que la repรบblica rusa se reservaba el derecho de reconsiderar sus fronteras, y con ello enfureciรณ al lรญder ucraniano Leonid Kravchuk. El gobierno de Yeltsin se echรณ para atrรกs y reconociรณ todas las fronteras existentes y, para diciembre de 1991, Yeltsin se uniรณ con los lรญderes de Ucrania y Bielorrusia en el bosque de Belavezha para disolver oficialmente a la URSS. Los nacionalistas rusos conservadores estaban enfadados por el sรบbito fin del control de Moscรบ sobre la regiรณn, pero como lo explica Zubok, fueron ellos quienes habรญan planteado la cuestiรณn de la soberanรญa rusa en un principio y se opusieron a Gorbachov cuando รฉl luchaba por salvar a la uniรณn.

El presidente kazajo Nursultรกn Nazarbรกyev se enterรณ de la reuniรณn en Belavezha despuรฉs de que esta habรญa sucedido. Yeltsin considerรณ que Kazajistรกn debรญa ser parte de una nueva comunidad de Estados independientes, pero querรญa dejar fuera a las repรบblicas โ€œmusulmanasโ€ de Asia Central. Nazarbรกyev insistiรณ en su inclusiรณn, y al final lo consiguiรณ. De acuerdo con el libro Central Asia (2021), de Adeeb Khalid, la independencia absoluta de la Uniรณn Soviรฉtica era algo โ€œinesperado y, en muchos sentidos, no deseado tanto por los ciudadanos como por las รฉlites polรญticas de Asia Centralโ€. Como proveedora de materias primas, la regiรณn estaba en desventaja por el aislamiento de las estructuras econรณmicas de la uniรณn. Por muy grande que fuera su entusiasmo por fortalecer la identidad y la autonomรญa nacionales, algunos polรญticos y miembros de la intelectualidad consideraban que incluso una uniรณn debilitada con Rusia era preferible a la separaciรณn. La sorpresiva disoluciรณn proclamada en Belavezha fue la ironรญa final del Imperio soviรฉtico: para pueblos considerados inferiores, incluso su libertad fue dictada por Moscรบ.

Mientras que las otras naciones del antiguo bloque del Este celebraban un โ€œregreso a Europaโ€, la fusiรณn de lo ruso y lo soviรฉtico impidiรณ la creaciรณn de una identidad nacional que se basara en quitarse de encima un yugo extranjero que la oprimรญa. Yeltsin esperaba que Rusia fuera bienvenida en โ€œOccidenteโ€ con un gran paquete de ayuda y su ingreso a la otan. En cambio, se le dejรณ en el โ€œEsteโ€ y apenas recibiรณ una magra asistencia humanitaria. Despuรฉs de dรฉcadas de que se les dijera que representaban a la civilizaciรณn mรกs avanzada del mundo, los rusos se vieron reducidos a comer raciones caducas del ejรฉrcito estadounidense. La โ€œterapia de choqueโ€ econรณmica del gobierno de Yeltsin, implementada en concordancia con asesores occidentales, trajo al paรญs una atmรณsfera de ilegalidad brutal que enriqueciรณ a unos cuantos y empobreciรณ a muchos otros. El economista neoliberal de Harvard Jeffrey Sachs y el Harvard Institute for International Development en Moscรบ ayudaron a diseรฑar la reforma de mercado y el paquete de privatizaciones de Yeltsin, que fueron implementados a una velocidad vertiginosa. Las tasas de crimen y mortalidad se dispararon al tiempo que los ahorros desaparecieron de la noche a la maรฑana.

Apabulladas por la inflaciรณn y las carencias, varias repรบblicas y regiones rusas desarrollaron movimientos soberanos destinados a conseguir ventajas polรญticas y econรณmicas por encima de otros territorios (incluida la tierra de Yeltsin, el รณblast de Sverdlovsk, que por un breve tiempo se declarรณ la โ€œRepรบblica de los Uralesโ€). Estas fueron en gran parte controladas por la Constituciรณn de diciembre de 1993 de Yeltsin. La Repรบblica de Chechenia, sin embargo, continuรณ buscando la independencia total, lo que llevรณ a que Yeltsin tomara la desastrosa decisiรณn de invadirla en 1994. La Federaciรณn Rusa era una red de repรบblicas basadas en la nacionalidad, distritos autรณnomos y regiones territoriales sin un concepto unificador. En junio de 1996, el gobierno de Yeltsin anunciรณ un concurso para generar una nueva โ€œidea nacionalโ€. Nunca se eligiรณ al ganador.

Los polรญticos nacionalistas rusos intentaron convertir la pobreza y la desilusiรณn en votos contra Yeltsin. Vladรญmir Zhirinovski, un provocador racista y antisemita y el lรญder de un partido con el engaรฑoso nombre de Partido Liberal-Demรณcrata de Rusia (PLDR), pedรญa un restablecimiento de un Estado autocrรกtico ruso dentro de las fronteras de la era soviรฉtica. El Partido Comunista de la Federaciรณn Rusa de Guennadi Ziugรกnov ofrecรญa una suerte de imperialismo ruso al estilo estalinista influido por el concepto de โ€œeurasianismoโ€ propuesto por Lev Gumiliov. Estos partidos lograron un รฉxito electoral moderado. El PLDR tuvo un buen desempeรฑo en las elecciones de 1993 y Ziugรกnov quedรณ atrรกs de Yeltsin por solo tres puntos porcentuales en las elecciones presidenciales de 1996. Pero muchos rusos, en especial la generaciรณn mรกs joven, estaban mรกs interesados en los problemas y las posibilidades del presente (incluidos los viajes al extranjero y los bienes de consumo), mรกs que en el mesianismo chovinista que miraba al pasado.

A lo largo de la dรฉcada de los noventa, las imรกgenes de pรฉrdida de poder y venganza fueron adquiriendo mรกs fuerza en la cultura popular rusa. Los hombres perdidos de las historias de Shukshรญn, por ejemplo, se transformaron en hรฉroes de acciรณn que ofrecรญan una masculinidad redentora por medio de la violencia. Danila, el protagonista del รฉxito de cine Brother (1997) y Brother 2 (2000), es un joven veterano de la guerra de Chechenia emprendida por Yeltsin, nacido en un pueblo empobrecido. En una escena al inicio de la pelรญcula, su abuela dice que Danila es un caso perdido y que morirรก en prisiรณn como su padre. Ella lo envรญa a San Petersburgo a que su hermano mayor sirva como su mentor, y este resulta ser un asesino a sueldo de la mafia. En lugar de ser vรญctima, Danila se convierte en un vigilante honesto que persigue a los malos (en especial a hombres del Cรกucaso), y protege a los dรฉbiles (rusos y rusas pobres).

En la secuela, Danila viaja a Estados Unidos para rescatar a las vรญctimas de un imperio del mal liderado por un empresario estadounidense aliado con la mafia ucraniana de Chicago y los โ€œnuevos rusos โ€œ de Moscรบ. Los โ€œOtros estereotรญpicosโ€ encarnan las amenazas que enfrentaban los rusos; en Chicago, conoce a una trabajadora sexual de nombre Dasha que es manejada por un padrote afroamericano abusivo. En el clรญmax de la pelรญcula, Danila cobra venganza con un tiroteo en una discoteca en el distrito ucraniano de la ciudad. La buena moral estรก claramente de su lado: Danila declara su amor por su patria y repite eslรณganes de la Segunda Guerra Mundial, del estilo: โ€œLos rusos en la guerra no abandonan a los suyos.โ€ Al final de la pelรญcula, รฉl y Dasha beben vodka en un vuelo de regreso y la canciรณn โ€œGoodbye, Americaโ€ (cantada por un coro de niรฑos) suena de fondo. Brother 2 se estrenรณ en 2000, el aรฑo en el que Vladรญmir Putin llegรณ al poder.

Putin mantuvo su distancia frente a los nacionalistas, afirmรณ que Rusia era parte de la โ€œcultura europeaโ€ y cooperรณ con la invasiรณn estadounidense a Afganistรกn, al mismo tiempo que tenรญa como una oposiciรณn leal en el parlamento al PLDR y a los comunistas. Como Yeltsin, selectivamente incorporรณ aspectos de sus ideas, por ejemplo, en su decisiรณn de recuperar el himno soviรฉtico. Rechazรณ otros de los caballitos de batalla de los nacionalistas rusos, incluidos el racismo explรญcito y el antisemitismo. Los precios al alza tanto del petrรณleo como del gas durante los dos primeros periodos de Putin (2000-2008) mejoraron significativamente la calidad de vida de los rusos. Putin defendiรณ cada vez mรกs que la misiรณn del paรญs era ser un bastiรณn de valores tradicionales que estaba listo para buscar restituciones por las indignidades sufridas en los aรฑos anteriores.

La anexiรณn de Crimea en 2014 elevรณ los รญndices de aprobaciรณn de Putin a niveles histรณricos entre rusos รฉtnicos, asรญ como entre tรกrtaros, chechenos y otros grupos de la Federaciรณn Rusa. Sin embargo, el entusiasmo pรบblico por una expansiรณn territorial mayor seguรญa siendo limitado. En enero de 2020, una encuesta realizada por el Levada Center descubriรณ que el 82 por ciento de los rusos pensaban que Ucrania deberรญa ser un Estado independiente. Las encuestas anuales han demostrado consistentemente que los rusos prefieren tener un alto estรกndar de vida que tener un estatus de poder muy alto (excepto en el momento de resplandor posterior a la anexiรณn de Crimea en 2014). Ahora, mientras Putin intenta canalizar la sensaciรณn de agravio nacional para apoyar una guerra a gran escala contra el vecino al que una vez se le prometiรณ la libertad, el caso soviรฉtico sirve como recordatorio de que el resentimiento es un arma impredecible. El orgullo y la victimizaciรณn de los rusos sirviรณ para impulsar al Imperio soviรฉtico en un momento en que la ortodoxia comunista perdiรณ la capacidad de convencer. Pero al final alimentรณ los argumentos de que la ambiciรณn imperial imponรญa un costo demasiado alto para el pueblo ruso, convirtiรฉndolo en un recurso desechable.

Shukshรญn muriรณ en el letargo relativo de la dรฉcada de los setenta soviรฉticos, cuando habรญa una especie de desorientaciรณn nacional que no necesariamente estaba vinculada con un programa polรญtico. Su obra no idealizaba un pasado desaparecido ni un futuro brillante. No habรญa chivos expiatorios ni salvadores, y los intentos de venganza terminaban en autodestrucciรณn. En su relato โ€œBastardoโ€ (1970), un exconvicto del campo considera matar a un hombre que cree que lo humillรณ, pero en lugar de hacer eso decide suicidarse. Durante sus momentos finales, siente โ€œla paz de una persona perdida que entiende que estรก perdidaโ€.

Putin se hizo adulto en la dรฉcada de apogeo de Shukshรญn, y conoce su obra. Como los nacionalistas rusos que alguna vez susurraron sobre asesinatos, รฉl ha intentado apropiarse de la memoria de Shukshรญn para sus propios fines. En noviembre de 2014 hizo acto de presencia en la adaptaciรณn teatral de los relatos de Shukshรญn en el centro de Moscรบ. Era el Dรญa de la Unidad Nacional, un dรญa de asueto imperial que su administraciรณn recuperรณ porque recordaba la expulsiรณn de las fuerzas polacolituanas del Kremlin en 1612 y la fundaciรณn de la dinastรญa Romรกnov. En las palabras que pronunciรณ al subir al escenario, Putin elogiรณ a Shukshรญn por mostrar a โ€œhombres sencillos, porque esta es la esencia de Rusiaโ€. โ€œEs una pena que Shukshรญn no estรฉ mรกs con nosotrosโ€, concluyรณ Putin. โ€œPor lo menos tenemos a sus hรฉroes. Rusia depende de ellos.โ€ ~

Traducciรณn del inglรฉs de Pablo Duarte.
Publicado originalmente enย Aeon.

+ posts

s escritora e historiadora de Rusia y Europa del
Este. Exreportera en Moscรบ, sus artรญculos se han publicado en
The New York Times, Foreign Policy, The Washington Post y The
Atlantic, entre otros


    ×

    Selecciona el paรญs o regiรณn donde quieres recibir tu revista: