Acuse de recibo

Amigo del perro cojo

Tedi Lรณpez Mills

Almadรญa

Oaxaca, 2014, 160 pp.

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Que โ€œno es tropo ni perro / simple de la pata tiesaโ€, escribe Tedi Lรณpez Mills en el โ€œCuaderno de las alucinacionesโ€, una de las cinco partes que componen su mรกs reciente libro de poemas, Amigo del perro cojo. Hecha la declaraciรณn, uno podrรญa sencillamente aceptarla o dedicar una de las varias lecturas que este libro propone para buscar quiรฉn es el perro, quiรฉn el amigo o tambiรฉn preguntarse, si uno es poeta, ยฟde quรฉ pata cojeo? Cualquier poeta-lector puede dar acuse de recibo pues probablemente se va a encontrar en estas pรกginas donde estamos casi todos: el poeta comprometido que exige denunciar la injusticia, escribir un comunicado, seguro de que โ€œla poesรญa debe hacerse cargoโ€; la patรฉtica lรญrica que estรก orgullosa โ€œde sus poemas melรณdicosโ€ y se pregunta quรฉ รกrbol le โ€œgustarรญa ver todos los dรญasโ€; el aguafiestas, el fantoche, el vate consagrado, โ€œel africano que cantaโ€, el moderno que mete โ€œrayas, / ensambles con videosโ€; el โ€œpuritano barrio adentroโ€ que lo critica; hasta โ€œgringos avergonzados, vestidos de juglaresโ€ vendiendo iluminaciones… Quizรก falte alguno, pero solo Tedi Lรณpez Mills puede saber por quรฉ no incluyรณ su tipologรญa. No es eso, sin embargo, lo que importa y sรญ, una discusiรณn que subyace en todo el libro: los โ€œdeberesโ€ del poeta y su relaciรณn con la realidad.

El โ€œDiรกlogo de sordosโ€ con el que abre la primera secciรณn (โ€œMiscelรกneoโ€) es el portal que debemos cruzar para internarnos en el libro. Aparecen en รฉl, por primera vez, el amigo del perro cojo, y el perro mismo, personajes que recorren todo el volumen a travรฉs de un diรกlogo en ausencia, pues quien escribe, viaja, piensa y discute estos poemas lo hace acompaรฑado de esas presencias. En Toluca, en Auxerre, en Estambul…; a travรฉs de cartas o postales; en el recuerdo de sus diรกlogos, aparecen aquellos que viven todo el tiempo en su cabeza:

Hoy el seรฑor de la casa mencionรณ

[el tema de las

conspiraciones internacionales.

[Desde lejos le guiรฑรฉ

al perro de la pata coja en mi

[cabeza

de testigo.

No iremos a Charleville.

Las presentaciones formales ocurren en โ€œUna vida en el dรญaโ€, donde el lector se entera de esa trinidad (โ€œEste es mi amigo del perro cojo. / Esta soy yo. / Este es el perro de la pata coja de mi amigo / que juega a la humildad conmigoโ€), pero tambiรฉn de la relaciรณn que se establece entre estos personajes y la realidad, percibida desde una fotografรญa en el periรณdico, que muestra โ€œun cubo que es una casaโ€, en un barrio โ€œllamado El Paraรญsoโ€.

Los cinco poemas que comprenden esta primera secciรณn son, a la vez, una muestra del contenido del libro y de los distintos acercamientos de Lรณpez Mills a su propia escritura, las voces que la rodean, divagaciones o alucinaciones pero, tambiรฉn, al espacio pรบblico o barrio desde donde los poetas se asoman para asumir โ€œcompromisosโ€ y levantar โ€œdenunciasโ€, constreรฑidos, sin embargo, a vecindarios mรญnimos, acotados.

No es reciente la idea de otorgar a los escritores un papel didรกctico y moral. El escritor se ha visto como el desinteresado guรญa de un pueblo que dedica su tiempo a buscar la Verdad. Si es poeta, a revelarla o denunciarla. Esa es su misiรณn y supone algunos โ€œdeberesโ€ del poeta โ€“ese raro y rebelde habitante de la polisโ€“ que muchas veces se transfieren a la poesรญa. No es raro, entonces, que se le exija al bardo un compromiso que deje asentado en su obra, sin lugar a dudas, su filiaciรณn y la causa que defiende, sea esta polรญtica y/o estรฉtica, que ya vienen siendo lo mismo. Aunque parezca increรญble, dada la naturaleza que se le atribuye al poeta, la duda estรก proscrita: es necesario ondear una bandera. Asรญ, el reducido barrio donde habita esta especie hoy parece un campo de batalla donde cada quien porta su estandarte y su consigna. No es la primera ni serรก la รบltima vez que vivamos arropados bajo el manto biempensante de la consigna, pues es el bรกlsamo para no pensar. Los oficiantes, nos muestra Tedi Lรณpez Mills en sus โ€œNotas desde un festival de poesรญa…โ€, refrendan su misiรณn mientras discuten โ€œcรณmo nos quieren vender, / cรณmo nos quieren comprar, / quรฉ va a hacer la poesรญaโ€.

Afortunadamente, Amigo del perro cojo es una mancha en la correcciรณn polรญtica y no faltarรก quien acuse a su autora de โ€œreaccionariaโ€, de insensible ante la devastaciรณn o la injusticia; de mostrar, cual irรณnico moralista, nuestras miserias para desnudarnos. Es decir, de portarse como poeta, de incomodar. Pero a nadie le gusta que lo incomoden aunque esa sea una de las misiones del poeta: criticar. ยฟCuรกntos adjetivos podemos endilgarle a la crรญtica? Tantos como a la poesรญa o a los poetas.

Podrรญa pensarse que este libro es solo una diatriba. No es asรญ. โ€œNadie va a entender casi nadaโ€, leo que dice un amigo del amigo del perro cojo en โ€œEl cuaderno de las alucinacionesโ€, secciรณn que inicia con una nueva advertencia: โ€œElla es una mujer abominable por natural. / Ella todavรญa no es yo, / por sensatez.โ€ Si nadie va a entender nada, no tiene ningรบn sentido sentir miedo, advierte aquel amigo. Pero el miedo estรก ahรญ: recorre muchas pรกginas en forma de un espejo donde la voz se mira, segรบn leo en el โ€œScrapbook de un viaje imaginario a Estambul/Ankara/Capadociaโ€, otra de las secciones:

Cada quien va con sus dos sombras:

una asida a la capa del miedo,

otra que no cabe en sรญ

por la discordia de algunas

circunstancias externas

ยฟA quiรฉn le habla este libro? ยฟQuiรฉn habla en este libro? ยฟQuiรฉn dice que en su poema โ€œla jaula soy yo / con un espejoโ€? Son tantas las voces que transitan aquรญ que la escritura se vuelve una curiosa interlocuciรณn. Hay un testigo que observa, nos observa, todo el tiempo y que discute, asiente o ironiza con voces cuya existencia depende del poema. El โ€œamigoโ€, โ€œel perro cojoโ€, โ€œEllaโ€, el โ€œDandyโ€, los vecinos y tantos personajes que hablan en este libro ยฟforman parte de las โ€œcircunstancias externasโ€ o son la misma voz que se desdobla una y otra vez?; que se pregunta siempre, que duda todo el tiempo y pone todo en tela de juicio, aunque advierta lรญricamente que โ€œla ironรญa / es un cable de luz / con su nudo en la penumbraโ€; que el sarcasmo es โ€œun esqueleto / bailarรญn o recรญproco / en la salaโ€; la alegorรญa, โ€œun tรญtere burdoโ€ y aun la rima, de la que hace juego y escarnio muchas veces, se pone en la picota, particularmente en los poemas que componen el โ€œDiario de un viajeโ€:

Nodriza del aire, mosto en los

[labios, supongo que

nadie se rinde, airado o

[condenado, nadie ni yo

aunque endurecida, casi ofendida

[por la destreza

de retirarme sin castigarme, ay,

[tanta rima que me

mima, quiรฉn me lima dรกndome

[amor sin darme,

fugitiva, al vuelo viva, una caridad

[con todo el

empeรฑo de un ala esquiva

Dice que dijo, que vio, que escuchรณ. En el vecindario, la murmuraciรณn es el pan y en el libro escuchamos tambiรฉn su crepitar, la lista de nuestras vergรผenzas: โ€œa quiรฉn odias, / a quiรฉn envidias, / a quiรฉn quieres espiar / cuรกl es tu lema o tu signo o tu banderaโ€. La mayorรญa de los motivos poรฉticos mรกs prestigiados se dan cita aquรญ: el desencuentro, la infancia, la enfermedad, el viaje, la amistad, la bรบsqueda, las โ€œvocesโ€… Escritura que desdeรฑa la poesรญa confesional, es, al mismo tiempo, una confesiรณn. Algo similar ocurre con las mรบltiples formas y tropos poรฉticos, pero tambiรฉn narrativos, que abraza con fortuna, aunque lo haga para evidenciarlos. Tenemos entonces una poeta que con las armas de la poesรญa se planta en medio de la sala para refutar los โ€œdeberesโ€ del poeta. ยฟY la democracia? ยฟY la violencia? ยฟY la belleza? ยฟY el compromiso? ยฟY… la realidad? El diรกlogo alucinante incluido en la secciรณn final del libro, โ€œDemocraciaโ€, nos pone de nuevo sobre la pista de las jerarquizaciones: ยฟquรฉ debe ser primero, bailar o pensar? (โ€œโ€“Que baile primero y luego pienseโ€, es como inicia el diรกlogo). La ironรญa sobre las virtudes de la democracia y nuestro papel en ella, nuestras palabras sobre ella, son materia dispuesta para el lirismo: (โ€œโ€“Eso es pensar al revรฉs sin el baile correspondiente que imagino en el lienzo de mi lirismo cuando me lo permito. Escucha: la estructura de tu vida en las mรกquinas que arruino equivale a tres cisnes tuertos en el lodo de la democracia. ยฟTe gusta? โ€“No se entiende. A las personas nos molesta no entender.โ€)

Cerca del final, uno de los hablantes asegura que no se vale pensar. Que aรบn no ha dado esa orden. โ€œBailando y pensando, llegaremosโ€, le contestan. โ€œHasta los muros del lirismoโ€, leemos en este que de pronto parece, como al inicio, un diรกlogo de sordos. Pero la voz que se cuestiona, y tal vez ella misma se responde, concluye el poema y el libro con una pregunta: โ€œY esto, ยฟcรณmo termina?โ€

Creo que he leรญdo todos los libros de Tedi Lรณpez Mills y quizรก me demorรฉ demasiado tratando de interpretar algรบn misterio que nacรญa en la condiciรณn hermรฉtica de su escritura. Pero el problema de la interpretaciรณn es siempre del lector, no del poeta ni, mucho menos, de la poesรญa. Lo cierto es que la escritura de Lรณpez Mills โ€“cuyo carรกcter conversacional, digresivo y/o narrativo, la distingue de varios de sus contemporรกneosโ€“ nunca transigiรณ con proferir โ€œnotas lรญricas y pajarilesโ€, como Borges lamenta que acostumbremos pensar de un poeta, al que siempre imaginamos con plumas de jilguero, olvidando que las โ€œdistinciones verbales deberรญan ser tenidas en cuenta, puesto que representan distinciones mentales, intelectualesโ€. Si Muerte en la rรบa Augusta fue la puesta en escena de esas distinciones mediante un entramado de formas y recursos sostenidos por el tono de un lenguaje muchas veces delirante, Amigo del perro cojo lleva a sus extremos las tantas paradojas y prejuicios que nos hacemos al pensar en los โ€œdeberesโ€ de la poesรญa y de los poetas. En ello radica una de sus distinciones y, en estos tiempos en que cualquier pretensiรณn original es motivo de suspicacia, yo celebro que Tedi Lรณpez Mills lo sea. ~

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(Ciudad de Mรฉxico, 1961) es poeta, ensayista y editora de poesรญa en Letras Libres. Este aรฑo su libro Estrella de dos puntas. Octavio Paz y Carlos Fuentes: crรณnica de una amistad (Ariel, 2020) recibiรณ los premios Mazatlรกn de Literatura y Xavier Villaurrutia.


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