En un editorial que aparece en el diario más objetivo de México, el Sr. Jaime Avilés aporta una reflexión que, por su relevancia, merece ser reproducida textualmente:
Esta columna siente el imperativo moral de advertir que Juanito puede ser eliminado por la mafia que le vendó los ojos con trajes Armani, camionetas Durango y promesas de dinero y poder. Si esto ocurriera, el régimen desataría (¡al fin!) una implacable persecución policiaca contra López Obrador. Juanito puede convertirse en un héroe del pueblo o en un chivo propiciatorio para la represión. Él sabrá lo que hace, pero ojalá recuerde que El Pípila no cobró un centavo por cargar la piedra hasta la puerta de la Alhóndiga, que el maquinista de Nacozari tampoco pidió dinero por salvar a tantos inocentes de la explosión del tren, y que los niños conscriptos no firmaron un contrato vergonzante con Televisa para defender el castillo de Chapultepec. El lugar de Juanito está entre su gente. Si cumple su promesa será indestructible.
Sí, Juanito, tu lugar está entre tu gente. Un traje Armani no se te va a ver bien. Nosotros te queremos bueno, simple y puro. Te queremos pueblo. Te queremos como eras cuando nuestro líder, en su superior sabiduría, sin siquiera saber cómo te llamabas, vio en ti la encarnación del desinterés y la solidaridad populares. Que no te cieguen. Que no te entrampen. Porque si continúas por ese mal camino te pueden eliminar. Y entonces el gobierno va a decir que te elimnaron por traicionar a tu causa y se lanzaría contra AMLO, que es tan bueno, puro y simple, y de quien todos dependemos. Mejor en lugar del traje Armani, arrópate en el amor de tu pueblo y acepta las 400 plazas de base que Clarita le regalaría al pueblo más cercano a tu corazón.
Anda Juanito. Tú puedes.
Juanito (el que está enmedio) con cuatro representantes del pueblo/
Foto: Daniel Rodríguez (tomada del periódico Reforma).
Es un escritor, editorialista y académico, especialista en poesía mexicana moderna.