Renato Tinajero
Fรกbulas e historias de estrategas
Ciudad de Mรฉxico, FCE/INBA/Instituto Cultural de Aguascalientes, 2017, 92 pp.
ยฟDe quรฉ hablamos cuando definimos un libro de poemas como รบnico, original o innovador? ยฟQuรฉ clase de propuesta es necesario presentar para ser considerado un poeta? Me he hecho estas preguntas mientras leรญa Fรกbulas e historias de estrategas. Su autor, Renato Tinajero (Ciudad Victoria, Tamaulipas, 1976), ha escrito un libro en el que la poesรญa aparece, predominantemente, bajo formas alegรณricas y metafรณricas. El ajedrez pretende ser en estas pรกginas un asunto y un motivo. Sin embargo, en la mayorรญa de los poemas, el ajedrez no alcanza a reflejarse ni como un juego humano ni como una metรกfora de lo bรฉlico, lo que debilita las bรบsquedas del verso, la imagen y el simbolismo poรฉtico. Ante una recurrencia de lugares comunes y una proclividad por la grandilocuencia, cabe preguntarse si la obra no ha sido rebasada por una idea previa, por el รญmpetu de crear forzosamente poesรญa incluso antes de que surja el primer verso. Es riesgoso para un autor comenzar un libro con una poรฉtica en la que se leen versos como los siguientes: โLa suerte es un fragmento de metralla. / La suerte es pan. Es una vaca por sus cuatro santรญsimos costados. / La suerte es tan antigua como la universal costilla.โ Quien lee lo anterior difรญcilmente evitarรก permanecer frรญo ante semejante combustiรณn de metรกforas que crecen y se acumulan de forma gratuita.
No serรญa fรกcil negar que la poesรญa en Latinoamรฉrica y en nuestro tiempo es un gรฉnero que se ha visto constantemente interpelado por la bรบsqueda de nuevas formas de expresiรณn. Es decir, la instancia de la experimentaciรณn resulta tentadora, pero a menudo deviene una exigencia castrante. Una loza para el temperamento autรฉnticamente libre e inquisitivo. Por contrapartida, un apego a las fuentes originales, a la tradiciรณn โcomo quiera que esta sea entendidaโ, tambiรฉn puede resultar, para ciertos temperamentos, un camino fรกcil de seguir. Esta es la reflexiรณn que mรกs me inquieta tras la lectura de Fรกbulas e historias de estrategas: ยฟde quรฉ hablamos cuando hablamos de una construcciรณn poรฉtica individual, propia, รบnica? Los poemas de Renato Tinajero sufren y gozan de lo mismo: la necesidad de circunscribirse al entorno poรฉtico, de afianzarse explรญcitamente a un camino discernible, y por esto me refiero a la amplia nomenclatura de lugares comunes lรญricos que vuelven impersonal y cerrado el decir lรญrico, fรฉrtil no para expresar vulnerabilidades y fisuras, sino mรกs bien ideas ya fijadas de lo que serรญan vulnerabilidades y fisuras: โsolo tienes que confiar: en el pulso y en la honda. / Y confiar tambiรฉn en mรญ, en que he aprendido a resistir la sed / y la serpiente en quien se apoyan, indemnes, mis pezuรฑasโ.
Los sรญmbolos religiosos y polรญticos tienen un carรกcter sospechosamente inmemorial: parecerรญan preceder a la Historia, aunque esto, en tรฉrminos reales, es imposible. La tentaciรณn discursiva, formalista, de la literatura, y en especial de la poesรญa, puede provocar que el texto asedie y se apropie de los espacios, los nombres, los adjetivos y las atmรณsferas que parecerรญan indestructibles, canรณnicos, por entroncar con referentes tradicionales de inconmovible pervivencia. ยฟHay una forma mรกs fรกcil de fingir poesรญa y de, al mismo tiempo, salir inerme? Por el contrario, la poesรญa โo aquello que supondrรญamos mรกs revolucionario en las posibilidades de la poesรญaโ quizรก no siempre lograrรก crear sus propios sรญmbolos, pero sรญ se verรก impelida a resignificar, con un cariz disolvente, desde una perspectiva inalienablemente individual, los cรณdigos pertenecientes a la memoria de la comunidad. Sospecho que el libro de Renato Tinajero exhibe esa tendencia primera: el apoyarse en mojones pretendidamente poรฉticos, pero sin dotarlos de expresividad. Solo una sucesiรณn de imรกgenes, y ya: โยฟEs este el despertar, o el sueรฑo en que se enfrasca / nuestro crรกneo en la punta de una pica? / ยกAh, perra seca de las encรญas grises, leoparda sarracena!โ
Ahora, conforme Fรกbulas e historias de estrategas avanza, los poemas adquieren una profundidad mayor; se discierne una ambiciรณn casi personal: โNuestra madre es una hormiga tibia demasiado sola, / demasiado singular para tan largo invierno. / ยฟY pensar que este duro pilar es nuestra patria? / ยฟY pensar que este duro pilar sostiene nuestro techo?โ
El autor crea en esta secciรณn postrera poemas con una conciencia literaria mรกs particular: โTorresโ, โConversaciรณn con la dama blancaโ, โConversaciรณn con la dama negraโ constituyen ejemplos de una fuerza en que se aprecia un espesor poรฉtico propio. Ciertamente, al libro no le falta nunca rigor rรญtmico, pero la abundancia de lugares comunes entonados desde la tรณnica grandilocuente, lo hacen pรฉtreo.
Me inclino a pensar que en todos los poetas hay un conflicto intransferible: arriesgarse a crear una obra รบnica o emular la obra de los poetas superiores que nos preceden. Por supuesto que entre las cumbres mayores se encuentra la reinterpretaciรณn de la obra de los maestros, pero, para situarse en este grado de comunicaciรณn, el poeta (iconoclasta o no) suele dar preeminencia a la interpretaciรณn personal (biogrรกfica o no) de su imaginario poรฉtico. Lo otro โel itinerario del homenaje y la veneraciรณn de la Poesรญaโ puede terminar generando obras rigurosas en tรฉrminos tรฉcnicos pero escasas en relieve y densidad. ~
(Ciudad de Mรฉxico, 1982) se define como "onirista". Por su segundo libro de poesรญa, Trรกnsito (Fonde Editorial Tierra Adentro, 2011), obtuvo el Premio Nacional de Poesรญa Carlos Pellicer.