Ayer en la noche reconfiguraron mi computadora para adaptarla al nuevo servidor de LL/M. La reconfiguraron mal, así que hoy no pude recibir correo. Cuando me pasé a trabajar a mi cuenta de Yahoo, resultó que tampoco funcionaba. Alguna fecha de vencimiento se había cumplido y la comunicación entre mi máquina y lo que sea que gobierne Yahoo era imposible. Subieron y bajaron técnicos, nadie supo qué hacer.
Como a la una de la tarde descubrí que el reloj de la computadora daba las ocho de la mañana. Entré a ponerlo a tiempo y noté que la fecha estaba en el 30 de diciembre de 1969. Modifiqué la fecha. Recordé que mis intentos por entrar a Yahoo se habían frustrado por algo relacionado con eso. Hice un nuevo intento y entré sin problemas. Se hizo una luz casi encegecedora entre mis turbiedades cerebrales. No se puede entrar a Yahoo desde un año anterior a la invención de Yahoo.
En el diálogo de los sistemas binarios no existen ni las mentiras, ni las tonteras, ni las intoxicaciones, de modo que si una máquina dice que está llamando desde 1969, todas las demás máquinas le creen.
– Álvaro Enrigue
