Crece el dióxido en mí,
me ocupa tanta me sulfura
toma de sí el aire y se compone de/
en ese momento ah/
números, cúmulos, gránulos
todo en un cuadro vital donde se absorbe
místicamente
en la garganta échale, pónele
jarras y jarras celestes:
Padre/Madre:
háganme salir al vuelo
volado de mi lengua en el inicio y el candor
de un cáliz cálido que calla y
“todo se va, María, ten calma”.
Y luego, niña, elude. Elude,
que únicamente el verde así
provoca vida parasiempre.
Ah
y en mí adentro de mí en mi dermis bío-bío
el melodrama:
pequeñísima gárrula garrapatea mis corvas
mis conmigo íntimas y célebres balbuceantes várices
mas ¿eh? son mis mías arduas ruinas
y tú
asquerosa con tus ocho patas me succionas gárgara
toda
y yo quedo de ti en ti
pávida
al cielo un punto débil en burbuja
envenenada: estalla: arácnida
el pie delante si un raspón hace una infancia
y las caricias Padre/Madre que no llegan
“pero niña”.
Toda la noche diciendo, toda la noche cayendo
en el viejo límite que marca el mar al alba
toda la noche ardiendo. Paz
para ellos árboles que aguardan el jardín
que nos aplasta
donde una lenta garra besa
lenta
besa dentro de mí en mi sangre
como un suave relincho en yerba fresca
y yo,
quedo
pues no sé bajo qué polvo
un dios me espera. ~
(1962) es poeta. Su último libro es Un leve aullido bajo la arena (Ediciones Monte Carmelo, 2023).