Granta se ha repetido muchas veces es la revista literaria más exitosa del mundo anglosajón. Nació en 1979 gracias al empeño de cinco estudiantes de Cambridge que decidieron recuperar una vieja publicación universitaria que se había muerto de puro aburrimiento, y desde entonces no sólo ha acogido a los mejores escritores del momento, sino que casi se ha inventado un género y ha auspiciado, por lo menos, tres generaciones de narradores en lengua inglesa. La noticia hoy es que al fin contamos con una versión en lengua castellana de Granta. Después de algunos intentos frustrados, el proyecto de este Granta en español ha sido llevado adelante por Valerie Miles y Aurelio Major, dos prestigiosos editores que acaban de presentar el primer número después de un número cero. ¿Cómo empezó todo? “Yo trabajaba para la sección de cultura de La Vanguardia“, cuenta Miles. “Entrevistaba a mucha gente, y un día me tocó conocer a Richard Ford, con el que al final acabaría teniendo una gran amistad. Fue él quien me comentó que Granta estaba pensando en hacer una edición en español. En aquella época, obviamente, yo no estaba en disposición de poner en marcha un proyecto tan ambicioso, pero no dejé de pensar en él. Cuando entré en el mundo de la edición, Richard me propuso que conociera a Rea [S. Hederman, presidente de Granta], y entre todos nos dimos cuenta de que teníamos muchas ganas de que el proyecto fructificase. Estuvimos hablando durante mucho tiempo, pero siempre surgían problemas. Más tarde, Aurelio se sumó al proyecto y, una vez que ya estuve trabajando en Planeta, dimos con la fórmula mágica. Empezaríamos muy pequeñitos, con discreción, sin pasacalles”. “No hay nada peor”, añade Major, “que empezar a lo grande y después tener que reducir colaboraciones y costes. Queríamos empezar del mismo modo que Granta cuando recuperó la vieja revista inglesa: con modestia”.
Finalmente las partes llegaron a un acuerdo y se hizo posible la publicación de Granta en español. ¿Pero se podía hacer una versión hispana de una revista con una idea de la literatura tan netamente anglosajona? ¿Iban a mantener las señas de identidad literaria de Granta? “Claro, si no habríamos fundado otra revista”, dice Major. “Además, podría pensarse que en España no existe tradición de lo que llamamos ‘reportaje narrativo’, pero fíjate, por ejemplo, en el caso de Millás. Y en América Latina no sólo tiene practicantes, sino publicaciones que los acogen, como TXT, Gatopardo o El Malpensante. Y por otro lado, por lo que respecta al cuento, yo tampoco estoy de acuerdo con la idea de que España no tiene tradición, porque sí la tiene, lo que pasa es que se le ha prestado poca atención.” En todo caso, aun siendo viable la fidelidad al espíritu Granta, lo cierto es que su versión hispana tiene, desde el primer número, una personalidad rotundamente propia. La revista se compone, con alguna excepción, de traducciones de piezas sacadas de la hemeroteca de la versión anglosajona y colaboraciones de escritores hispanos: Aramburu, Atxaga, Cabrera Infante, Cozarinsky, Gopegui, Marías, Prieto Vidal. Todos muy distintos: “Queremos que la revista tenga mucho de calidoscopio. No queremos que se repita la fórmula en todas y cada una de las piezas, porque entonces sería aburrida. En la revista se percibe una gran diferencia de estilos porque quiere ser una especie de muestrario de todas las posibilidades del lenguaje”, comenta Miles. “Eso es”, prosigue Major, “porque además Granta en español es una revista extrínseca. Se hace en Barcelona, donde se habla en catalán, y está hecha por dos extranjeros. Me parece que no se puede tener más vocación cosmopolita. Y eso puede servirnos para tender puentes, es decir, explorar el desarrollo de la literatura en español, y llevarla, por ejemplo, a Estados Unidos, donde existe un verdadero interés por la literatura latinoamericana y donde, por supuesto, se vende la revista. Además, y esto es fundamental, algunos de nuestros autores se traducirán para la revista inglesa.”
“La acogida de la revista en el extranjero está siendo muy buena”, cuenta Miles. “Acabo de volver de la Feria del Libro de Londres y agentes de todas partes del mundo me preguntaban cómo podían suscribirse. Granta en español va a ser un filtro del que se podrán nutrir las editoriales extranjeras. Porque queremos, muy especialmente, que sea un proyecto de exportación de la cultura, la literatura y el periodismo en lengua castellana”. Este éxito se está produciendo también aquí. “La respuesta por parte de la prensa ha sido amplísima. Las ventas son buenas y estamos en números negros. Además, el próximo número llevará publicidad, se harán suscripciones y más adelante estará en los kioscos”, me comenta Major, que prefiere no adelantar el tema monográfico del próximo número, pero sí sus colaboradores: Enzensberger, Fresán, el propio Ian Jack (sobre los atentados de Madrid), Martínez de Pisón, Pamuk, Theroux, Villoro. Saldrá el 15 de junio. Harán una tirada de siete mil ejemplares y una reimpresión en Argentina para la distribución en América. No se la pierdan. ~
(Barcelona, 1977) es ensayista y columnista en El Confidencial. En 2018 publicó 1968. El nacimiento de un mundo nuevo (Debate).