El plagiario
Ya con esto acabo el enojoso asunto de los plagios de Sealtiel Alatriste que se han relatado y probado en este blog:
1) “Un beso en una Alcarria soรฑada”, Revista de la UNAM. Plagia “Palabra de Nobel: Camilo Josรฉ Cela” del escritor espaรฑol Javier Villรกn.
2) “Su propia destrucciรณn”, Revista de la UNAM. Plagia “Oscar Wilde”, sin firma, en la Red Escolar Ilce.
3) “Morir mil veces”, Revista de la UNAM. Plagia la entrada “Fiรณdor Dostoievski” en wikipedia.
4) “Breve crรณnica alrededor de la ginebra”, Revista de la UNAM. Plagia “Bebida clรกsica si la hay” en taringa.net.
5)“Melancolรญa a cuestas”, Revista de la UNAM. Plagia la entrada “John Lennon” de buenastareas.com
6) “Dรญas de menos”, Reforma. Plagia “2006 aรฑos bajo el sol” del espaรฑol Jesรบs Sรกnchez Adalid.
7) “Mahasamahdi”, Reforma. Plagia “El gurรบ del cuerpo incorrupto” de Swami Paramahansa Yogananda.
8) “El verdadero Sherlock”, Reforma. Plagia la entrada “Sherlock Holmes” en wikipedia.
…Y no tiene caso seguir. Es un modus operandi que ya justificรณ Alatriste al declarar no sรณlo que รฉl asรญ escribe, copiando material ajeno, sino que esa es su poรฉtica.
Lo dijo durante la presentaciรณn de los libros que le merecieron el Premio Villaurrutia 2011, como prueba este video donde sostiene la teorรญa esa –ya comentada aquรญ– de que tomar pรกrrafos de otros escritores es “una cita literaria elevada al cuadrado” y que suele tomar “elementos literarios de otros relatos, de otras fuentes” y hasta “pรกrrafos y diรกlogos” pero que eso “constituye algo nuevo, algo diferente.”
Dice en ese video que los libros ahora premiados “siguen este mismo patrรณn.” Dice que, Dreamfield, su primera novela “transforma” la novela de Hawthorne, Wakefield; que su novela Verdad de amor “parte de Los papeles de Aspern de Henry James”. Declara que “muchos de mis artรญculos fueron escritos con este procedimiento, tomando ideas de aquรญ y allรก, sin que nunca hubiera tenido la intenciรณn de perjudicar a nadie al citarlos o tomar algรบn pรกrrafo de otro escrito.” (Sรญ, es raro que diga que toma pรกrrafos de otros y luego diga que nunca tuvo la intenciรณn de hacerlo, pero en fin.)
En suma, dice: “quizรกs deba aรฑadir que prรกcticamente todo lo que escribo ha sido elaborado sobre estas bases.”
A confesiรณn de parte…
Alatriste dice que esto es una “poรฉtica”. Ignoro en quรฉ medida los jurados que lo premiaron estaban al tanto de esta “poรฉtica”. Tambiรฉn ignoro si les parezca una “poรฉtica” a las instituciones premiantes, contantes y sonantes: la SAI, el INBA y el CONACULTA. Ya se verรก en su momento.
Por lo que a mรญ toca no es una poรฉtica: tomar material escrito por otra persona y ponerle el propio nombre se llama plagio. Ponerle a esa conducta el nombre sagrado de la poiesis ni siquiera es chistoso.
El mezquino, la leche
A pesar de que el Sr. Alatriste habรญa declarado a Proceso que no iba a dignarse hablar de este asunto, parece hacerlo en el video al cerrar su discurso refiriรฉndose a “un crรญtico mezquino”.
No sรฉ si ese crรญtico mezquino sea yo, porque mezquino, dice el DRAE, significa avaro, falto de nobleza de espรญritu, pequeรฑo, diminuto, pobre, necesitado, desdichado, desgraciado, infeliz y siervo plebe. Y yo, francamente, avaro no soy.
¿Quรฉ hizo el crรญtico mezquino? Contesta Alatriste:
tratรณ de quitarle mรฉrito a las crรณnicas sexenales de Salvador Novo porque supuestamente habรญa copiado pรกrrafos enteros de la Enciclopedia Britรกnica. Leรญdas hoy, si hay algo original en la crรณnica nacional, es el registro diario que aquel poeta hizo a travรฉs de sus textos sin importar cรณmo los haya escrito. No cabe duda: confundir al todo por la parte es una de las formas mรกs acabadas del infundio.
¿Serรฉ yo? En Los Contemporรกneos ayer (FCE, 1985) mostrรฉ que Novo habรญa usado pรกrrafos de un par de entradas de la Enciclopedia Espasa-Calpe en algunos Ensayos (1925), como el dedicado a la leche. Es todo. Mi ensayo sobre las crรณnicas sexenales, “Los periodos de Novo”, estรก en mi libro Seรฑales debidas (FCE, 2011) y, desde luego, no dice la barbaridad que Alatriste imputa al tal mezquino.
Si cree que soy yo tendrรญa que probarlo, lo que es imposible; sus plagios, en cambio, estรกn probados hasta el hartazgo. Sus escritos tienen la curiosa costumbre de no ser suyos: su infundio sรญ.
Y basta. Cuando se iniciรณ este lรญo dije que me parecรญa una pena que un escritor engaรฑe y manche con su deshonestidad a las letras mexicanas y al nombre de Xavier Villaurrutia. Exagerรฉ. Seguirรก la farsa, la “gesticulaciรณn”, “la mentira de Mรฉxico”…
No importa. Las verdaderas letras mexicanas estรกn en otra parte.
Es un escritor, editorialista y acadรฉmico, especialista en poesรญa mexicana moderna.